Milenio Puebla

“NO ESPERAMOS AYUDA, NUNCA HA LLEGADO”

las carretaras están cerradas y con deslaves, por lo que 40 rancherías, donde hay 500 viviendas afectadas, están incomunica­das; tampoco hay energía eléctrica y los víveres empiezan a escasear

- POR ÓSCAR RODRÍGUEZ FOTOGRAFÍA LUIS ALBERTO CRUZ

Los habitantes de los pueblos mixe de la sierra de Oaxaca fueron golpeados por las lluvias y rematados por el terremoto de magnitud 8.2 del jueves 7 de septiembre, el más fuerte de los últimos 100 años en México.

La región está severament­e afectada: los ríos se desbordaro­n, las carretaras, como la Mitla-Tehuantepe­c y la 169 Ayutla-Choapam, están cerradas y con deslaves que incomunica­n a 40 rancherías donde hay más de mil 500 familias.

Un censo señala que en 12 municipios hay hasta alrededor de 500 viviendas dañadas por caída de bardas, cuarteadur­as y desplome de techumbres; además hay tres iglesias y siete escuelas con fisuras.

Por el temblor además se rompieron rocas en algunos cerros, generando la caída a cascadas de aguas que inundan parte de los caminos.

Las comunicaci­ones están interrumpi­das, no hay teléfono, internet y energía eléctrica; los víveres empiezan a escasear.

Ante la desesperac­ión y la falta de ayuda por parte de los gobiernos estatal y federal, los pobladores de Santa María Zacatepec se organizaro­n para retirar los escombros que han dejado las tormentas y el terremoto.

Los habitantes de las comunidade­s rurales e indígenas mixe no esperan la ayuda del gobierno, porque “nunca ha llegado”. Por ello, optaron por organizars­e para auxiliarse y atender principalm­ente a los afectados por la caída de sus viviendas, apoyándolo­s para la reconstruc­ción, elaborando adobes fabricados a base de tierra, abono, carrizo, lodo y arcilla.

“Aquí, en nuestra tierra, la de los nunca conquistad­os, se nos ha enseñado desde niños a realizar adobes. Los hacemos con tierra y lodo, y vamos a trabajar en su elaboració­n para ayudar a nuestros hermanos en desgracia... ojalá y el gobierno apoye con la entrega de laminas para colocar los techumbres que se desplomaro­n”, comntó Javier Cruz Sánchez, presidente de bienes comunales de Santiago Zacatepec.

En medio de la destrucció­n, en un tramo de la carretera que conduce de la población de Yacochi a Zacatepec, hay una capilla que, “de milagro”, advierten los lugareños, no fue arrastrada ni sucumbida al registrars­e el desgajamie­nto de un cerro.

Los viajeros que la cruzan la bautizaron como “La virgen del Desfilader­o” y se encomienda­n a la imagen que quedó cubierta con cemento, mientras alrededor se observan los vestigios del desastre.

Maribel Alejo Cristóbal, regidora de Salud, y Cruz Romero, secretario municipal de Santiago Zacatepec, exigieron que los gobiernos federal y estatal volteén a las zona de la sierra que están en condición de desastre.

“La ayuda no solo debe ser canalizada en el Istmo, aquí también tenemos destruccio­nes y daños, y no queremos que se nos olvide y se nos siga ignorando, como ha pasado con otros fenómenos naturales”.

 ??  ?? Los pobladores se organizan para reconstrui­r sus hogares.
Los pobladores se organizan para reconstrui­r sus hogares.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico