VENTA DE PRODUCTOS PARA TODOS SANTOS SE MANTIENE ESTÁTICA
Comerciantes de hojaldras, fruta, dulces, abarrotes y florerías asentados en los mercados de la ciudad de Puebla coincidieron en señalar que ya se encuentran listos para ofertar todo lo relacionado con la festividad, pero existe un desánimo en la gente
Aunos días de que inicie la colocación de las ofrendas, la venta de productos alusivos a la época de Todos Santos se mantiene estática, coincidieron en señalar comerciantes de hojaldras, fruta, dulces, abarrotes y florerías asentados en los mercados de la ciudad de Puebla, que fueron entrevistados por MILENIO PUEBLA.
Los locatarios indicaron que mientras ellos ya se encuentran listos para ofertar todo lo relacionado con la festividad denotan un desánimo en la gente, contrario a lo que se registró todavía hasta el año pasado, que para estas fechas ya, se observaba a personas comprando papel picado, copal, incienso, veladoras, calaveritas, candelabros y lo necesario para recordar y recibir a sus fieles difuntos, de acuerdo a la tradición mexicana.
Los vendedores apuntaron al incremento en el precio de los artículos, a la pérdida de las tradiciones entre las nuevas generaciones, a los problemas económicos de las familias y a la parálisis que provocaron los terremotos en el flujo del dinero, como los aspectos que pudieran influir en sus bajas ventas.
Ante ello, concordaron que a pesar de esta situación sólo les queda como alternativa esperar a que los clientes acudan en busca de los productos para colocar sus ofrendas de muertos.
Sin precisar el porcentaje en que han disminuido las ventas, todos admitieron que año con año, éstas van a la baja.
“Yo estoy aquí desde que era chico. Recuerdo que antes la gente venía y compraba por caja la fruta y el año pasado hubo gente que vino y se llevó de a una (pieza) para su altar. Eso lo dice todo”, señaló Javier, quien atiende un puesto de frutas en el mercado Diagonal Defensores de la República.
Punto en que coincidió el señor José, quien oferta el mismo producto, pero en el mercado Venustiano Carranza: “No joven. Esto cada vez es de a menos. A los jóvenes ya no les interesa y quienes lo hacen, lo hacen por tradición o porque en su casa sus papás se los piden. Pero ellos ya no lo quieren hacer”.
Aspecto en que también se manifestó la señora Martha, vendedora de candeleros, copal, incienso y veladoras en el mercado Ignacio Zaragoza. “Mire a mi cada vez está más caro el producto. Tan solo el copal está en 800 pesos el kilo y luego aquí no lo quieren. Pues prefiero no invertir. Si ‘nomás’ en el incienso vienen y se les hace cara la bolsa de 100 gramos a doce pesos. Me regatean y la quieren a diez, y pues no, no me sale. Hace unos días vino una señora con su hermana y me preguntó que a cómo tenía la veladora. Le dije que a quince pesos. Su hermana le dijo que no la comprara, que en el centro estaba de a diez. Pero le expliqué que esta es de marca y le rinde más. Pero se fue. Después volvió y me contó que la asaltaron, que para qué le hizo caso a su hermana, que le salió peor”.
“Hasta ahora no se ha visto el movimiento. Esperamos que la próxima semana ya mejore. Sí ha bajado mucho la economía. Al menos aquí en el mercado se nota porque entra y sale la gente, como hay negocios alrededor, aquí cerca están San Alejandro y Ortopedia, luego, luego se nota cuando hay movimiento, pero ahora está muerto”, señaló Agustín, quien atiende una frutería en el mercado de la Diagonal.
“Ya dejen en paz al terremoto ¿Qué no tienen otras noticias? ¿Qué en el país no pasa nada bueno? Ustedes los medios de comunicación tienen la culpa de que haya inseguridad, miedo y que la gente ya no compre. Como todo el tiempo están dice y dice eso la gente ya no sale a comprar como antes. Ustedes son los culpables”, aseguró el señor Juan, quien vende en el interior del mercado Morelos calaveritas y casi todos los productos para decorar un altar.
DE 80 A 200 PESOS GASTAN EN OFRENDAS
Aunque apuntaron que hay quienes llegan a gastar mil o mil 500 pesos para decorar sus ofrendas, los mercantes establecieron como gasto promedio de los 80 a los 200 pesos por familia para dicho fin.
“Normalmente como unos 70, 80 pesos (gastan). Se llevan poco. Hay gente que se llega a llevar unos 200 o 250 pesos, pero ya es raro. Antes había gente que hacía ofrendas grandes, ahora ponen poquitas cosas, entonces sí. Muchos dicen que la tradición se está acabando. Entonces yo creo que sí es cierto”, expresó Agustín del mercado de