Persiste en la industria del acero
El excedente de producción se vende al exterior subsidiado ilegalmente y en muchos casos se le aplica
La industria del acero tiene un problema grave con su tamaño: necesita adelgazar. En todo el mundo, un exceso de plantas representa una amenaza para la salud del sector, de acuerdo con los ejecutivos de la industria.
Incluso con la reciente recuperación de los precios del acero, los esfuerzos de China para reducir su extensa industria y las medidas adoptadas para desalentar las importaciones en muchas regiones no han logrado mitigar las preocupaciones. “Nuestro problema de exceso de capacidad (global) es malo”, dijo John Ferriola, director ejecutivo del grupo estadunidense Nucor, al hablar en la reunión general anual de la Asociación Mundial del Acero realizada en Bruselas a principios de mes. “Eso resulta en altos niveles de exportaciones que en algunos casos son ilegalmente subsidiadas y a las que se les aplica dumping en otras naciones”.
El problema del exceso persigue a la industria desde hace años. Cuando las acereras están infrautilizadas el uso que hacen de materias primas es menos eficiente y los productores tienen que reducir los precios en su lucha por obtener pedidos y cubrir sus altos costos fijos de operación. Pero hay una nueva urgencia política, con acusaciones de prácticas de comercio desleal que provocaron medidas proteccionistas en varios países.
Un fuerte aumento en las exportaciones, sobre todo de China, contribuyó a la caída en el precio del acero hace dos años. Eso afectó fuertemente las ganancias en empresas como Arcelor Mittal, Posco —de Corea del Sur— y US Steel, lo que provocó grandes pérdidas de puestos de trabajo y aumento en las dudas sobre el futuro de la industria en algunos países desarrollados.
Las autoridades en Estados Unidos y la Unión Europea respondieron al implementar aranceles en categorías de acero que se considera subsidiado o que es objeto de dumping, que se vende por debajo del costo de producción o a precios del mercado doméstico, de una serie de países.
Donald Trump también ordenó una investigación de la “sección 232” para determinar si las importaciones de acero plantean una amenaza de seguridad nacional. Se esperaba en el verano un informe para sentar las bases para la aplicación de fuertes aranceles, pero se retrasó.
Desde entonces las condiciones mejoraron y las utilidades se recuperaron, pero los ejecutivos de las principales siderúrgicas siguen preocupados por el exceso de capacidad . “El dumping es la amenaza más inmediata para toda la industria del acero en Europa”, dijo Geer van Poelvoorde, presidente del grupo europeo de cabildeo Eurofer y un ejecutivo de ArcelorMittal. “El exceso de capacidad en un mercado realmente global no ayuda a nadie en el largo plazo; China, que representa la mitad de la producción mundial, es el objeto de las críticas. Las empresas occidentales y los gobiernos alegan que subsidia ilegalmente a las acereras deficitarias que descargan en el extranjero cualquier exceso de producción a bajos precios. A medida que el ritmo del crecimiento económico de China se enfrió, sus siderúrgicas, muchas de ellas con respaldo del Estado, utilizaron las exportaciones como una válvula de escape.
Sus ventas al extranjero aumentaron más del doble entre 2008 y 2015, para llegar a 112 millones de toneladas, más que el total consumido en Estados Unidos, aunque el nivel ya comenzó a caer. Si bien alrededor de mil 670 millones de toneladas de acero se hicieron en todo el mundo el año pasado, existe la capacidad instalada para hacer 737 millones de toneladas más, de acuerdo con estimaciones de la OCDE.
Pero la OCDE dijo que el exceso la mitad de lo que se produce de este metal a escala mundial subió más del doble entre 2008 y 2015 para superar lo consumido por EU mundial caerá por debajo de 700 millones de toneladas este año debido al aumento de la demanda, y Pekín dijo que está a más de dos tercios del camino de su objetivo de cerrar permanentemente plantas con una capacidad para producir 150 millones de toneladas de acero al año.
China también dio un impulso a la consolidación para eliminar las acereras más pequeñas y menos competitivas. La fusión de Baosteel y Wuhan Iron and Steel el año pasado, por ejemplo, creó la segunda siderúrgica más grande por tonelada, solo por detrás de ArcelorMittal.
Pero aunque las exportaciones de acero de China cayeron, hay llamados para que se reduzcan aún más. Van Poelvoorde dijo que aunque el suministro cayó “ligeramente”, todavía “hay un largo camino por recorrer”. “Más de la mitad del exceso total está en China, así que es la primera zona donde se debe abordar el problema”, señaló.
En respuesta al argumento de que el exceso de capacidad no solo se limita a China, los ejecutivos de algunos productores estadunidenses y europeos dicen que sus regiones no van a necesitar recortes si las importaciones caen a los niveles promedio históricos.
También hay temor de que los recortes de capacidad de China puedan cancelarse debido al aumento de producción en otras partes. India estableció un objetivo de aumentar su capacidad más del doble, para llegar a 300 millones de toneladas al año en 2030.
Mientras tanto, Irán aspira a exportar entre 20 y 25 millones de toneladas a mediados de la próxima década a medida que se levanten las sanciones.
Si comparas la demanda estimada para los productos terminados de acero en 2035 con la capacidad instalada, entonces podemos decir con bastante seguridad que ahora hay suficiente capacidad mundial para satisfacer la demanda en los próximos 20 años”, dijo Edwin Basson, director general de World Steel Association.
China representa Su venta extranjera