Tiempos nuevos en el PRD
Mientras usted, estimado lector, está leyendo este artículo, en el PRD poblano se está limpiando la casa ya que fue removida Socorro Quezada Tiempo, y este día se desarrollará el V Consejo Estatal de este partido. En el punto tercero se ordena realizar las actividades pertinentes para nombrar al sustituto que ocupará la presidencia del Comité Ejecutivo Estatal.
¿Qué quiere decir esto? Que Socorro Quezada Tiempo deja de ser presidenta del partido y se refugia en los brazos de Barbosa, en Morena, de Andrés Manuel y de Anaya del PT, ¿Por qué? Porque le demostraron que desvió recursos humanos y materiales del PRD hacia la pasada campaña de Delfina, de Morena en el Estado de México, resultando falso de toda falsedad que fue expulsada por oponerse a la Coalición con el PAN.
En su defensa, Quezada alega: “Sin duda alguna, mi oposición a la coalición pasa a afectar los intereses políticos y económicos de Rafael Moreno Valle en Puebla y a su proyecto personal nacional”. A esta declaración no le encuentro sentido, denota un odio personal hacia la figura de Moreno Valle, pero de ningún modo es el pensamiento mayoritario del PRD.
Fueron muchas las veces en que Quezada se manifestó en contra de que el PRD Estatal se uniera al Frente Amplio para contender en 2018. Como antecedente, en las elecciones de 2016, la dirigente perredista se opuso a que su partido fuera en alianza con el PAN en los comicios por la gubernatura, dejando al partido en el cuarto lugar con un 3.8% de la votación, la más baja de todas las elecciones.
Como posibles candidatos para sustituirla se encuentra el doblemente ex regidor, Arturo Loyola, que es un experimentado luchador social, con muchas horas de vuelo, y Carlos Martínez Amador, director general del Colegio de Bachilleres, persona que tiene mucha simpatía con los jóvenes millenials, así como con el gremio de los profesores. Cualquiera de las dos opciones sería una bocanada de oxígeno para el PRD poblano.
Socorro, en un acto de dignidad y de congruencia política deberá de acatar la voluntad mayoritaria de los perredistas poblanos que no desean que su próximo gobernador sea un proxeneta de la política, sino por el contrario, desean una alianza triunfadora por el bien y el progreso del estado, esperemos que en la conferencia de prensa que dará el lunes así lo manifieste.
La ambigüedad que se ha dado entre perredistas, no puede continuar y menos en estos tiempos electorales, independientemente de que Quezada mantuvo una postura muy crítica contra el gobierno de Moreno Valle, como presos políticos, espionaje y otros más que jamás pudo comprobar. Lo que sí se comprobó es que los presos políticos que ahora tanto defiende, los encerró por primera vez el senador por el PT, Manuel Bartlett, me refiero a la familia de Rubén Sarabia Sánchez, alias Simitrio, una verdadera célula criminal.
Por otro lado, tenemos información de que la honestidad valiente está a punto de ser quebrantada, es decir, que la aureola con la que se protegió Andrés Manuel de terminar con la corrupción es en realidad un edén de dinero mal habido, y en sus dieciocho años de campaña, casualmente se usó dinero público allegado ilícitamente y hasta podría salir a relucir dinero negro.
Creo que es necesario no tener miedo ante los tiempos nuevos, es seguramente el nacimiento, el comienzo de un nuevo periodo que deberá ser un gran tiempo para el PRD.