Domina el terreno
Viajamos a Chihuahua para poner a prueba esta nueva generación de este SUV, el cual llega al mercado mexicano con algo más que un lavado de cara, toda vez que, tanto su equipamiento y desempeño prometen ofrecernos una nueva dimensión de manejo, tanto dentro como fuera del asfalto.
Visualmente los cambios de este vehículo son notables ahora presume de unas líneas más deportivas y dinámicas.
El frente es afilado con una parrilla que se enlaza con una moderna configuración de luces que le da una imagen muy actual, mientras que los detalles en cromo realzan su estética. Los faros de niebla son un valor agregado además de su gran entrada de aire que sirve para optimizar la refrigeración de su motor.
Lateralmente presume de grandes dimensiones, así como de una musculatura que no encontramos en muchos de de sus rivales de mercado, además de unos atractivos rines de aluminio con un estilo vanguardista.
La parte trasera fue lo que más nos llenó el ojo con un diseño, que rompe los esquemas del segmento, con unas luces que recorren la cajuela hacía abajo otorgando una mayor visibilidad, además de elevar en gran medida su carácter emocional.
En el interior encontramos materiales agradables a la vista y al tacto, además de sistemas de comunicación e infoentretenimiento, los cuales cuentan con las plataformas necesarias para incluir a cualquier smartphone.
Son tres versiones de Mitsubishi Montero Sport las que se comercializarán en nuestro país: Sport GLX 4x2, Sport Advance 4x2 y Sport Advance 4x4. Su precio parte de los 609 mil 900 pesos en su versión de entrada y alcanza los 689 mil 900 en el tope de la gama.
Su motor es un V6 3.0 litros que desarrolla 216 caballos de fuerza, con un torque de 210 lbpie acoplado a una transmisión automática de cocho velocidades.
Los caminos chihuahuenses se convirtieron en nuestro laboratorio de pruebas en los que pusimos al descubierto las capacidades de este SUV.
En los tramos de carretera el desempeño de su motor cumplió con las expectativas. Sin embargo, nos habría gustado un poco más de punch sobretodo para realizar con mayor agilidad los rebases de los autos que viajan a menor velocidad.
Al llegar a los caminos sinuosos la precisión de su dirección salió a relucir permitiéndonos atacar las curvas con gran ritmo, ayudaos por sus controles de tracción y estabilidad.
En la terracería demostró que no le tiene miedo a los caminos extremos y menos a ensuciarse ya que en todo momento mostró el aplomo y las capacidades necesarias para vencer situaciones de terreno ante las que sus rivales simplemente harían el ridículo.
En conclusión Mitsubishi nos presenta un paquete completo con un SUV que es diferente no sólo en su diseño, sino también en las prestaciones que ofrece. Uno de los contendientes más fuertes en este nicho de mercado ha llegado.