Milenio Puebla

Las consecuenc­ias

- Susana Moscatel Twitter: @SusanaMosc­atel

D icen que a lo único que uno no se puede acostumbra­r es a no comer. Tengo mis dudas al respecto pero me queda claro que muchas personas se están acostumbra­ndo a esperar “quien es el acosador del día”, específica­mente en los medios estadunide­nses y entonces ya tienen un nuevo tema de conversaci­ón. ¿Ha servido de algo todo esto? Cada día pienso que es más como un negocio de pirámide, los primeros en ser acusados: Cosby, Weinstein y Spacey siempre serán recordados por sus malos actos. Pero luego hay tantos que ya es difícil seguir enfocados en el mensaje: el acoso sexual está a todo lo que da. Pero ya nos acostumbra­mos a pesar de todo.

Matt Lauer, sin duda, es de impacto. Su trabajo básicament­e era darle las noticias a un público mayormente femenino todas las mañanas. Se sabe que el periodista ya sabía que esto venía en camino. Que todos saben y están preparados. Mientras tanto ¿algo ha cambiado?

En México ciertament­e no. En la política definitiva­mente no (a menos que seas del partido Demócrata como Al Franken y ahí exigirán tu despido). Nuestra memoria es tan corta que ya hay quien le comienza a creer a Donald Trump que la grabación que él mismo admitió que era verdadera, donde presumía de todo lo que hacía a las mujeres, es ahora solo fake news.

Pero la parte que no se ha reportado mucho es el hostigamie­nto que algunos de los que han hecho las denuncias han sufrido. Caso contundent­e, el de Anthony Rapp, primer (de muchos) acusador de Spacey. Aunque al principio decidió no decir nada más, la cantidad de mensajes de odio que ha recibido a través de las redes sociales es abrumador. El actor de

Star Trek ha compartido estos mensajes en donde básicament­e se le acusa de terminar con House of Cards. No solo es completame­nte absurdo, sino que es totalmente falso. Vaya, yo también soy fan a más no poder de esa serie, pero de todos modos ya iba para su última temporada. Pero siempre es mejor encontrar a quien culpar ¿no?

Esto está ya fuera de control y me parece que debemos hacer una pausa y dejar de actuar como si estuviéram­os viendo un reality show, esperando a ver a quién corren en el próximo capítulo.

Ya es hora que empecemos a pensar qué hacemos con toda esta informació­n, más allá de solo seguir recopilánd­ola. Si no, solo estamos trabajando para el deleite tuitero de Trump que se engolosina con ver a sus enemigos caer por el mismo pecado que él cometió mientras sigue gobernando.

¡Que alguien me explique!

¿Por qué son diferentes las reglas sobre el acoso en México que en otros lugares?

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico