Sucesión gubernamental
Si voy como candidato presidencial, quien sea el candidato a gobernador ganará en automático, pero de no ser nominado, seguro perdemos la elección local en 2018.
La anterior fue la sentencia y el pronóstico del entonces gobernador, Rafael Moreno Valle, en una de esas conversaciones aéreas con este reportero, en una de las intensas gira de trabajo en regiones rurales del estado.
Para esas fechas, en la recta final de su sexenio, el entonces mandatario estatal no hizo mención alguna de una eventual postulación a la candidatura de su esposa, entonces primera dama del estado, Martha Erika Alonso.
Reinaba el optimismo en Moreno Valle, apoyado en el ejercicio del poder y, como buen financiero y economista, hacía cuentas y cálculos de los porcentajes de aceptación y conocimiento que debería alcanzar para buscar la nominación a la candidatura presidencial del PAN.
Uno de los principales acicates que lo impulsaban a emprender la importante empresa de la candidatura presidencial era su reciente designación como presidente de la Comisión Política del CEN del PAN, que le permitiría intervenir en la designación de candidatos.
Moreno Valle confiaba a este reportero que una vez concluida su administración y decidida su búsqueda por la candidatura presidencial, “no metería las manos” en la designación de candidatos en los comicios concurrentes (federales y locales) de 2018.
Tony Gali, me aseguró, será quien “lleve mano” en la sucesión gubernamental y tendrá toda la libertad de definir las candidaturas a la titularidad del Ejecutivo estatal, en la alcaldía poblana y en los distritos locales al Congreso del estado.
Fue en ese vuelo donde delineó la manufactura del libro (“La Fuerza del Cambio”) donde él hablaría de los resultados de gobierno, en ánimo y perfil de contrastes con los resultados como gobernador de una de las entidades con mayor crecimiento del país.
Concluido su sexenio, que a la vez se convirtió en la plataforma de lanzamiento de sus aspiraciones presidenciales, con Tony Gali ya como gobernador constitucional, obviamente algo cambió.
Si bien hay pleno consentimiento de Gali en la virtual postulación de Martha Erika Alonso, qué candidaturas más palomeará Tony para cumplir la regla no escrita de “poner candidato(s)”.