Cura da misa junto a templo histórico en riesgo
Pese a las inciertas condiciones de conservación y seguridad de la iglesia de San Sebastián Mártir, en el Estado de México, el párroco insiste en oficiar en su atrio y en remodelarlo
Aunque la iglesia San Sebastián Mártir, en La Paz, Estado de México, está cerrada y asegurada debido a los daños causados por el sismo del 19 de septiembre de 2017, el párroco Pedro Manzanero Estrella oficia culto en el atrio, una zona que el INAH sugirió no utilizar por considerarla riesgosa, aunque Protección Civil del municipio otorgó un permiso. Sin embargo, la comunidad no posee ningún dictamen que le brinde certeza.
Integrantes del Patronato Pro Obras de Reconstrucción y Mejoramiento de la Parroquia de San Sebastián Chimalpa denuncian negligencia de las autoridades municipales y la unilateralidad de las decisiones del párroco, lo que, aseguran, ha puesto en riesgo a la feligresía y ha atentado contra el inmueble, catalogado como Patrimonio Histórico.
El templo es un bien histórico por haber sido construido en el siglo XVII, según la ficha 18070008 de registro del Catálogo Nacional de Monumentos Históricos Inmuebles del Edomex, del INAH; también es uno de los 334 inmuebles que en esa entidad fueron afectados por el sismo del pasado 19 de septiembre.
Los daños que el inmueble presenta son graves, confirmó a MILENIO el director del INAH en el Edomex, Antonio Huitrón: perdió la cúpula de la torre derecha, así como la vigueta del campanario y su campana; además, el resto del edificio presenta grietas y cuarteaduras.
Por ello el inmueble fue cerrado y asegurado con sellos. No obstante, el sacerdote ha oficiado misas en el atrio, cerca de la torre dañada, al menos dos o tres por día, mientras que los domingos son más si hay algún acto como bodas o bautizos, denuncian Óscar Méndez y Martín López Rosales, presidente y secretario del Patronato (cuya creación fue a convocatoria del sacerdote y del que él mismo forma parte), acompañados por al menos 15 integrantes más, quienes dicen representar a un centenar de personas de las seis colonias de este barrio.
“Yo me siento muy triste; incluso dejé de venir a misa porque me da miedo con todo esto”, dice la señora María de los Ángeles Martínez, vecina del lugar.
El 23 de septiembre, durante su visita de evaluación, Alejandro Machuca, arquitecto del INAH, sugirió no usar el atrio: “Si pueden, hagan las misas fuera o apóyense inclusive en otra iglesia. Es difícil, pero ya ustedes verán cómo le pueden hacer, incluso aquí en la calle”, dijo el funcionario de la Coordinación de Monumentos Históricos, según se ve en un video de miembros del Patronato. El especialista aclaró que, si bien no había riesgo inminente de colapso de la torre, por seguridad y porque puede haber algún desprendimiento de materiales o de las cornisas, no debían oficiarse misas en el atrio.
Pero el 9 de octubre, en un documento firmado por el comandante Juan Ramón Sánchez Martínez, director general de Protección Civil y Bomberos de La Paz, Edomex, se sugiere al sacerdote “obtener un Dictamen de Construcción y Mecánica de Suelos, para conocer con certeza el estatus del lugar, con el fin de evitar algún riesgo que afecte la integridad de las personas que asisten al templo, considerándose en Rojo el inmueble”.
Dictámenes
Consultado vía telefónica por MILENIO, el presbítero Pedro Manzanero Estrella dijo que posee un permiso que Protección Civil municipal le entregó con fecha 13 de octubre, en donde le autoriza realizar actividad dentro del atrio y dijo que lo enviaría a esta redacción vía correo electrónico. Hasta el cierre de esta edición no ha llegado.
“Este documento nos lo leyó un día, pero nadie lo ha visto. Suponiendo que fuera cierto que le dieron permiso, ¿en qué tiempo se hicieron los estudios de mecánica de suelos que la misma área de Protección Civil le sugiere obtener?, ¿en tan solo cuatro días y por eso le expidieron el permiso?”, cuestionó Méndez.
MILENIO solicitó entrevista con el comandante Sánchez Martínez, pero el encargado de prensa del gobierno municipal, Erick Reséndiz, comentó que esa área no puede dar entrevistas, pero dijo que al párroco sí se le entregó un visto bueno para poder oficiar en una parte del atrio. Al ser cuestionado sobre cuál fue el criterio para entregar este permiso, remitió a Protección Civil del gobierno del Edomex.
Elba Chávez Lomelí, de Comunicación Social del gobierno del estado, señaló que ese tema no es de su jurisdicción: “Según el Código Administrativo de esta entidad, hay una diferenciación en cuanto a la responsabilidad de los inmuebles: la de mediana y alto riesgo es del estado, y la de bajo riesgo es de carácter municipal”.
En el apéndice del Código, el listado de Generadores de Mediano y Bajo Riesgo clasifica como de bajo riesgo a las asociaciones y organizaciones religiosas, por lo que es jurisdicción municipal.
Así, mientras ninguna autoridad se responsabiliza de dictaminar el riesgo de usar el atrio para misas, algunos feligreses se sienten en peligro. El INAH, según el arqueólogo Huitrón, posee un dictamen que no fue entregado en su momento por falta de fotocopias, aunque está a disposición de los interesados. Pero ese documento se refiere a los daños al patrimonio histórico, que es su área de acción, no de protección civil.
Huitrón explicó: “Que Protección Civil lo haya clasificado como un punto rojo significa que tiene un riesgo alto; por tanto, la afectación es, en materia de patrimonio cultural, importante, y, como asunto de protección civil, un riesgo alto”. “Que Protección Civil lo haya clasificado como un punto rojo significa que tiene un riesgo alto” “El problema es que el padre primero hace las cosas y luego pide permiso”: Óscar Méndez Obras sin licencia Manzanero Estrella intentó instalar una techumbre en el atrio de la iglesia, donde ahora está colocada una carpa que le donó el gobierno del Edomex, lo que él considera un permiso tácito para usar ese lugar para misas.
Para colocar esa techumbre tiró dos árboles de olivo que, dicen los integrantes del Patronato, tenían más de un siglo de edad. El 21 de diciembre intentó talar una palmera datilera, también muy antigua. Esto generó un conato de violencia entre quienes apoyan al padre y quienes cuestionan sus acciones. “Además perforó en 11 ocasiones el suelo del atrio para colocar dados que servirían de soporte de este techo; cuatro de ellos ya están colados y los demás se quedaron así. El problema con el padre es que primero hace las cosas y luego pide permiso. Eso mismo ocurrió con este proyecto”, indicó Méndez.
Eso también sucedió con una obra de habilitación del altar, para la que Machuca solicitó al sacerdote gestionar una licencia. A la fecha no solo no se ha hecho, sino que no existe en el expediente del inmueble, confirmó Huitrón.
El director del INAH en el Edomex indicó que la obra de la techumbre no está autorizada, según el documento informativo que entregó al padre el 10 de enero. Añadió que el arquitecto Javier Martínez Burgos evaluará próximamente esta situación, pero aclaró que “tampoco podemos autorizar elementos constructivos definitivos, como es el caso de estos dados de cimentación que incluye la colocación de la techumbre”.
Señaló que en caso de determinarse que hubo daño al patrimonio histórico, se procederá legalmente: “Debemos determinar cuál fue el procedimiento de extracción de estrato y su impacto; si hubo algún elemento de carácter histórico o arquitectónico que sufrió un daño, por supuesto que nosotros, en cumplimiento de nuestras facultades, iniciaríamos los procedimientos administrativos y en su caso penales que deriven la atención de esta situación con el patrimonio histórico”.