TRASCENDIÓ

Que

luego de que un juez federal concedió una suspensión provisional contra acuerdos de una asamblea del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, en el gremio todo es calma porque confían en que la interpretación jurídica que hasta la noche de ayer tenían es que el dirigente Juan Díaz de la

Torre sigue al frente. Se espera que en las próximas horas el sindicato tenga algo que decir de forma oficial, pero ayer, además, los tranquilizó saber que la SEP, mediante su vocero Eduardo

Gutiérrez, dijo que la dependencia solo reconoce relación laboral con el SNTE encabezado por el propio Díaz de la Torre.

Que

las filas priistas están felices con la rápida reacción de José Antonio Meade a la provocación de Tatiana Clouthier, coordinadora de la

precampaña de Andrés Manuel López Obrador, en Twitter. Dicen los priistas que el ya famoso

#YoMero, que se convirtió en trending topic, los dejó más que satisfechos y listos para aprovechar la fuerte estructura en el espectro de las redes sociales.

Que

por cierto, en el PRI nacional, que encabeza Enrique Ochoa

Reza, estarán alertas en la temporada de intercampañas que comienza el lunes, pues muchos estrategas aprovechan para pegar a sus adversarios, dicen, con fakenews, como las de Mérida. Resulta que los adversarios de Víctor

Caballero Durán, precandidato a la alcaldía, han acudido a la descalificación a partir de revivir noticias viejas, ya aclaradas, pero que sirven para golpear de nuevo y generar confusión.

Que

quien estuvo en lo alto por unos momentos y demostró que está dispuesto a echar mano de cualquier cosa para subir en las preferencias electorales fue el precandidato presidencial de la coalición Por México al Frente, Ricardo Anaya, quien en un mitin en San Andrés Cholula tuvo que utilizar una silla para hablar desde un templete a los jóvenes. Sin embargo, más tardó en subir que en bajar, ya que su discurso ante cientos de militantes solo duró nueve minutos con 58 segundos, el más corto de estos casi dos meses de precampaña. Y no faltó, por supuesto, quien creyó que se marea con las alturas.