ENRIQUE ACEVEDO
@Enrique_ Acevedo
En un país resignado a importar mejores prácticas en vez de crearlas, Verificado es una iniciativa absolutamente refrescante y completamente necesaria, sobre todo en el contexto de la elección que arranca formalmente esta semana. Es también un esfuerzo único con el que periodistas, activistas y estudiantes mexicanos marcan una hoja de ruta para que otras democracias puedan enfrentar el reto global de la desinformación.
México y sus más de 60 millones de usuarios de internet y 35 millones de usuarios de WhatsApp es un país particularmente vulnerable al ecosistema de noticias falsas y de propaganda facilitado por los medios sociales y la comunicación digital. Somos un país acostumbrado a la manipulación informativa y al uso de los medios de comunicación para avanzar o proteger intereses Verificado comerciales, corporativos y políticos. En general, exigimos pocos de nuestros medios y de quienes los representan.
Para los mexicanos siempre ha sido complicado distinguir entre la noticia auténtica y la gacetilla pagada. A esto se suma el uso de bots y trolls con el que se pretende manipular la conversación en línea, una práctica común entre las entidades oficiales en todos los niveles de gobierno y que alcanza también a los candidatos que buscan exagerar el poder de su mensaje con hashtags y likes inflados artificialmente.
Por eso es tan importante reconocer los beneficios de Verificado y su innegable valor democrático. Un electorado mejor informado es un electorado que toma decisiones libres y conscientes. Para esto, el proyecto colaborativo de verificación de discurso y contra noticias falsas cuenta con la participación de más de 60 medios, organizaciones civiles y universidades en todo el país y el apoyo de Facebook, Google News Lab y Twitter.
En este contexto, los creadores de Verificado reconocen que los medios de comunicación “juegan un papel clave al servir al lector y darle herramientas para saber qué es cierto y qué es falso”. La verificación se ha convertido en una responsabilidad individual entre quienes consumimos y compartimos contenido. Es tarea de todos cuestionar el origen, el propósito y la veracidad de las noticias que guían nuestro punto de vista. El equipo de verificadores que agrupa la iniciativa resulta un aliado inmejorable en la lucha histórica por la verdad en nuestro país, lucha que promete intensificarse como nunca, durante los próximos 90 días.