Veracruz: fallecen 6 policías y un civil por motín en penal
El problema se originó por el traslado de cuatro internos peligrosos a una cárcel federal
Seis policías y un civil muertos, así como al menos 22 heridos fue el saldo del motín en el penal de La Toma, del municipio de Amatlán, que se prolongó por varias horas.
Miguel Ángel Yunes, gobernador de Veracruz, explicó que el motín se debió al traslado de cuatro reos de alta peligrosidad a una cárcel federal de máxima seguridad.
Alrededor de las 22 horas del sábado, policías estatales y del municipio de Orizaba ingresaron a la prisión de La Toma, con el objetivo de llevar a cabo la reubicación de los cuatro presos.
Fueron repelidos por algunos internos, quienes se apoderaron de herramientas de la carpintería y quemaron colchones.
“Al ingresar al centro (de reclusión), seis de los elementos policiacos fueron agredidos y encerrados en un espacio sin salida. Los internos prendieron fuego y provocaron que con el humo se intoxicaran y perdieran la vida los policías”, explicó el gobernador.
Todos los accesos carreteros y caminos aledaños a la cárcel fueron cerrados por elementos de seguridad, mientras frente al penal familiares de los internos exigían informes de la situación.
Como pasaron varias horas sin reportes, desprendieron la malla colocada en las áreas de ingreso.
De acuerdo con algunos reportes, al menos unos mil 300 internos se amotinaron y los policías retomaron el control del penal alrededor de las 6 de la mañana de este domingo.
Ayer, luego de participar en un encuentro extraordinario del Grupo de Coordinación Veracruz, Miguel Ángel Yunes explicó que el motín se debió a cuatro reos de alta peligrosidad que, pese a todo, fueron trasladados ya a un penal federal de máxima seguridad.
Precisó que los sujetos generaban problemas graves de violencia en la zona conurbada de Córdoba-Orizaba y otros municipios de la región de las Altas Montañas.
“Estos individuos forman parte de bandas de delincuentes organizados y están vinculados a homicidios, secuestros y otros delitos graves. Como consecuencia de su cercanía con la zona donde encabezaban bandas delictivas, su permanencia en el penal de Amatlán facilitaba las actividades en contra de la sociedad que llevaban a cabo”, refirió el mandatario veracruzano en su mensaje a medios.
Señaló que con base en los dictámenes periciales de la fiscalía estatal, se confirmó que hubo siete muertos a causa de “asfixia por confinamiento”, dos de ellos policías municipales y cuatro estatales.
De la otra víctima, indicó que aún se analiza su identidad, pues no se sabe si era reo o custodio, ya que no estaba uniformado.
También fueron hospitalizados 15 policías, uno de los cuales fue reportado grave. “Por razones de seguridad se reservan sus nombres” y los nosocomios donde se encuentran, abundó el gobernador.
Dio a conocer que la fiscalía de la entidad abrió varias carpetas de investigación.
Yunes dijo que concertó con familiares de los internos un mecanismo de comunicación, que contará con el apoyo de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos (CEDH).
Por separado, Jaime Téllez Marié, secretario de Seguridad Pública del estado, informó que por estos hechos dos custodios fueron arrestados y varios internos quedaron separados.
Por la tarde , personal de la CEDH ingresó al penal, que se mantenía aún rodeado de policías de corporaciones estatales y federales.