Tener bailarines de otras compañías, como del American Ballet Theatre, de EU; de dos diferentes compañías de Rusia, de San Petesburgo, del Ballet Mariinsky y de la Mikhailovsky, así como primeros bailarines del Staatsballett, y una primera bailarina de la
Esta vez vamos a
Con muchísimo gusto vamos a estar en Puebla, otra vez, este año, revela en entrevista telefónica, desde Berlín, Alemania la “prima ballerina”, del Berlín Staatsballet, Elisa Carillo. El 19 de julio cerrará la gira de este 2018 por nuestro país, de su gala “Elisa y sus amigos”, en el Auditorio Metropolitano.
En exclusiva, Carrillo, la primera mexicana en haberse convertido en la “prima ballerina” de una de las compañías de ballet más importantes de Europa y del mundo, anunció el programa que ella y sus invitados harán en la Angelópolis el próximo verano:
Cada año cambiamos el programa de mi gala; entonces, esta vez vamos a tener bailarines de otras compañías, como de la Compañía del American Ballet Theatre, de Estados Unidos; tendremos a bailarines de dos diferentes compañías de Rusia, de San Petesburgo, del Ballet Mariinsky y de la Mikhailovsky, así como primeros bailarines de aquí, de Berlín, del Staatsballett, y una primera bailarina de la Ópera de Viena.
Elisa Carrillo, quien, por la labor social que realiza a través de la fundación que lleva su nombre, además de su nivel artístico, puede ser considerada “Prima Ballerina Assoluta”, un rarísimo título que pocas han obtenido desde finales del siglo XIX que se dio el primer título, hasta hoy, agregó:
Además, tendremos a parte de la Compañía del Staatsballett presentando un ballet que creó nuestro director, Nacho Duato, hace ya muchos años, el cual es uno de mis favoritos y tenemos la oportunidad, finalmente, de llevarlo a México y estrenarlo allá, por lo que lo presentaremos también en Puebla.
La bailarina se nota emocionada y sabe lo cerca que ya está la fecha de su regreso a México, por lo que comentó respecto a ella y sus compañeros de las otras compañías que podremos ver el 19 de julio:
A pesar de ser mexicana, nacida en el Estado de México, la vez pasada que fui me quedé sorprendida de la belleza de Puebla, aunque toda mi vida había ido allá, viajaba mucho a la ciudad, pero tenía años sin la oportunidad de ver toda la belleza que tienen, de
ir al centro, de conocer… Y el año pasado todos los bailarines nos quedamos sorprendidos de la joya que es la ciudad de Puebla; y de los bailarines que irán este año, ninguno ha estado en la ciudad.
Recipiendaria de diversos reconocimientos en su estado natal, por parte del gobierno federal y de la Cámara de Senadores, de quien
recibió el título de Embajadora de la Cultura de México, agregó:
“Me siento muy emocionada, porque para los bailarines que irán a Puebla en julio, es muy interesante saber que van a conocer otra parte de nuestro país, y todos están igualmente emocionados, sobre todo mis compañeros de acá, del Staatsballett de Berlín, pues yo
les he contado de la experiencia del año pasado, y con ellos, precisamente, es con quienes vamos a cerrar nuestra pequeña gira de gala este año, y además, la última presentación será en Puebla, lo cual es muy emocionante, por el hecho de saber que va a ser en esta ciudad, que ahí vamos a cerrar con broche de oro”.
“Tendremos a parte de la Compañía del Staatsballett presentando un ballet que creó Nacho Duato”
“Es uno de mis favoritos y tenemos la oportunidad, finalmente, de llevarlo a México y estrenarlo allá”
Segunda llamada
Nuestra primera gala en la ciudad fue algo muy muy emocionante, porque Puebla es una ciudad bellísima a la que siempre había querido ir, y tuvimos un gran recibimiento por parte del público; fue una experiencia nueva, en un nuevo escenario, para nosotros los bailarines; los invitados vieron otra parte de nuestro país y otro público: la gente fue súper cálida, hubo muchísimo interés, recordó Elisa Carrillo respecto a la gala de “Elisa y sus amigos” que presentó en julio del 2017 en el Auditorio Metropolitano, al que este año regresará.
También recordó: “Antes de la presentación tuvimos una plática con los niños (estudiantes de ballet) quienes estaban muy emocionados; nos quedamos muy muy contentos y con la ilusión de regresar y, bueno, ahora estamos muy contentos de poder regresar este verano a Puebla”.
Todavía afinando los detalles de la gira de “Elisa y sus amigos” que concluirá en Puebla pero que antes será presentada en otras urbes, incluida la capital del país, la “prima ballerina” aceptó en entrevista telefónica desde Berlín, donde vive:
“Este año estamos planeando si vamos a tener otro encuentro con los niños y jóvenes estudiantes de ballet; estamos abiertos y por mi parte, será muy emocionante si se dan las cosas para que los niños puedan acudir al evento y hacer una plática para ellos; eso es algo para lo cual estoy siempre abierta, y ahorita es algo que hay que ver en la organización para que se planee todo y podamos repetir el encuentro”.
Fundación Carrillo
El trabajo de becar a niños y niñas bailarinas es algo que se hace a través del gobierno del Estado de México (yo soy mexiquense), a través de su instituto de cultura; y a través de mi Fundación Elisa Carrillo hacemos la elección para saber quién es el niño o niña ganadora, por lo que cada año se ha ido un niño al extranjero, respondió la bailarina del Staatsballett de Berlín, donde vive con su marido, el primer bailarín ruso Mikhail Kaniskin “Misha” y la pequeña hija de ambos.
Bailarina desde que era niña, con una formación en el Instituto Nacional de Bellas Artes, Elisa Carrillo tiene esa fundación porque sabe de lo difícil que es estudiar ballet en nuestro país, y hacer estudios de especialización fuera
de México; y más aún, lograr un primer sitio en una compañía europea, como ella, por lo que confesó:
La verdad es que estamos muy emocionados, porque el apoyo a los niños a través del gobierno y mi fundación es algo que sigue en pie, que se sigue haciendo, y los jóvenes tienen todavía esa ilusión de ganarse un lugar, poder viajar al extranjero y continuar con sus estudios. Son ya cinco años de este apoyo, y se sigue haciendo, por lo que año tras año se va eligiendo a un niño, por lo que este verano iré a México y haré la elección para que el niño ganador se pueda ir en el 2019. a estudiar fuera del país.
Sin embargo, Elisa Carrillo es realista gracias a su propia experiencia de dejar el país y la
familia, aprender o practicar un idioma que no es el materno, e incluso cambiar de dieta con algo completamente distinto a lo que uno está acostumbrado en el lugar donde nación, por lo que, lejos de todo “romanticismo”, reconoció:
“Uno les ayuda a los niños a que abran las alas para que vuelen, pero el camino que van a tomar después es algo que ellos tienen que decidir, porque hay casos donde los niños viajan y, después, por alguna razón o por la situación, las circunstancias los hace pensar de otra manera; algunos regresan, otros se quedan”.
Pareciera, entonces, que el apoyo gubernamental y de la fundación, el esfuerzo de llevar a un niño a otro país, en algún momento pudiera ser vano; pero Elisa Carrillo habla desde lo vivido,
desde lo que conoce, de lo que sigue viendo en otros jóvenes inmigrantes en Europa, de México o de otros países latinoamericanos:
“Insisto: uno apoya a los niños para que abran las alas y ya después ellos son los que tienen que decidir si se van a quedar ahí, si van a seguir trabajando o si van a tomar otro camino. Pero claro, es muy importante impulsarlos. Y es como en todo: uno en la vida le da la oportunidad a las personas, o llegan a un nuevo trabajo, y depende de cada uno si se quedan ahí, si va a seguir creciendo o en algún momento se van a ir”.
Por ello, Elisa Carrillo, la “prima ballerina” mexicana que está en un primer lugar que muchos buscan, incluso durante años, afirmó:
Lo que uno hace es apoyarlos
para que alcancen ese sueño, pero también ya depende de los niños que lo lleguen a alcanzar”.
El año pasado, aquí en Puebla, Elisa Carrillo afirmó:
La danza, como el arte y la cultura, están aquí, justamente para que toda la gente, todos los que estamos sufriendo por la violencia, veamos la luz al final del camino. Las artes son lo único que nos pueden salvar; es la única manera de llegar a la parte más sensible del corazón de los seres humanos. Es muy importante que ahora, en nuestro país, apoyemos mucho los eventos culturales para que le gente vea otras cosas, bellas, para que no se enfoque nada más en lo negativo; que las nuevas generaciones conozcan, se eduquen y sepan que hay otros caminos en la vida.