“Si hoy filmara Rojo amanecer se repetiría la injusticia”
A 50 años de la matanza del 68, el director mexicano asegura a MILENIO que le “gustaría realizar una película sobre una sociedad más igualitaria”
pudo exhibirse. También había una censura previa. Por ejemplo, yo tenía el guion y cuando se lo ofrecía a los productores me decían: ‘¡No, estás loco! ¿El 68? No, no me interesa’. “Cuando imprimen ese control a tal grado, muchas veces no se necesita prohibir con palabras. Incluso se empieza a actuar desde la autocensura. Siempre tiene uno que tener la antena muy arriba para darse cuenta de que eso actúa permanentemente en los miembros de la sociedad.
“La expresión artística o ideológica debe ser libre para que haya un desarrollo individual y social. Ahí es donde la censura que aplica un sistema puede ser muy dañina”.
Rojoamanecer? Sigue siendo la desigualdad y la injusticia. El mundo se ha limpiado de máscaras: se van cayendo y el sistema va dejándose ver como es. La sociedad está viendo esa gran división que existe entre quienes tienen todo, que son cada vez menos, y los que no tienen, que son cada vez más. El empuje de la democracia no es suficiente para rescatar un camino digno. “Lo que narra Rojoamanecer es la tragedia: la expresión más violenta del régimen para reprimir. Me gustaría hacer una película donde haya visos de búsqueda de una sociedad más justa e igualitaria. Esa sería la gran aspiración para hacer cine ahora. Esa sería la película”. Es un gran reconocimiento a mi obra. Uno siempre lo juzga inmerecido, pero también lo considero un honor por venir de mi almamater. La Cátedra es una entidad que en pocos años ha realizado una labor interesante. Todo eso hace que la presea esté llena de significados respetables para mí.