MEMORIA GRÁFICA DEL “2 DE OCTUBRE”
Museo de la UAP exhibe 150 fotografías del movimiento
E n el marco del 50 aniversario de los acontecimientos que se suscitaron en el año de 1968, el Museo de la Memoria Histórica Universitaria de la Universidad Autónoma de Puebla (UAP) ha diseñado una exposición con la que recupera la memora gráfica del Movimiento Estudiantil del 68 y sus implicaciones políticas, sociales y culturales en nuestro país.
Una muestra que reúne más de 150 fotografías que develan momentos claves del movimiento estudiantil de ese año en México y de aquellos registrados en muchas partes del mundo.
Una exhibición en la que los recuerdos del movimiento estudiantil de 1968 se convertirán en crónicas. Los asistentes conocerán a mujeres y hombres que vivieron el 68 y que sin palabras contarán su historia.
Claro oscuros que ampliarán el número de voces y visiones sobre ese momento de la historia reciente del país.
El propósito es construir un pensamiento crítico en torno a la ciudadanía a través de la reflexión sobre el Movimiento estudiantil de 1968, para ello emplean a la fotografía como fuente documental de lo que ocurrió aquel año en México y el mundo: “Para recordar y aprender lo que no queremos que vuelva a suceder”, señaló en la inauguración el rector de la máxima casa de estudios, Alfonso Esparza Ortiz.
La muestra “1968 a través de la memoria” incluye afiches, volantes, carteles y fotografías cuyos autores no están identificados, porque en los movimientos sociales, la colectividad y el anonimato son lo más importante.
Las fotos, casi todas en blanco y negro, muestran los momentos cuando los jóvenes iniciaron una lucha que hasta la fecha tiene repercusiones y se manifestaron para impulsar un nuevo proyecto de nación que marcó el desarrollo del país en diversos ámbitos: en educación, equidad de género, sindicalismo, democracia y pluralidad ideológica, entre otros; hasta llegar a la represión y la matanza que se registró el 2 de octubre de 1968 en la Plaza de las Tres Culturas de Tlatelolco.
Las imágenes exhiben los momentos en que el grupo paramilitar denominado Batallón Olimpia, la Dirección Federal de Seguridad (DFS), la llamada entonces Policía Secreta y el Ejército Mexicano, se lanzaron en contra de la manifestación convocada por el CNH.
En el primer espacio de esta muestra, los visitantes se encuentran con los discos: De Tlatelolco a Tlatelolco mascarones, algunos acetatos de The Beatles, Roberto Jordán, Los Leos y Johnny Dynamo, entre otros. También se exhibe un tocadisdos de 1967.
Les acompañan algunas revistas, tales como México Canta, Contenido -de enero del 69-, Life en español, Notitas musicales y un especial de México 68.
También está presente el libro Tlatelolco 68 de Juan Miguel de Mora en su sexta edición.
Se puede observar un collage donde se exhiben todos los movimientos estudiantiles que se presentaron en la época, como la Primavera de Praga, Vietnam, Sicilia y el Black Power en los Estados Unidos.
Hay una reproducción de Alexander Dub ek, secretario general del Partido Comunista de Checolovasquia en el periodo enero 1968-abril 1969.
Se pueden ver imágenes de la Primavera de Praga, periodo de liberación política que surgió en Checoslovaquia durante la Guerra Fría que se prolongó desde el 5 de enero al 20 de agosto de 1968, fecha en que el país fue invadido por los cinco países que conformaban el Pacto de Varsobia: Alemania Oriental (RDA), Bulgaria, Polonia, Hungria y la URSS, quienes de manera simultánea concretan en un sólo día la invasión.
Los recuerdos del movimiento estudiantil de 1968 se convierten en crónicas Conocerán a mujeres y hombres que vivieron el 68 y que sin palabras contarán su historia
En otra sala hacen un recuento mes por mes de lo que aconteció ese año. Mencionan en enero la Guerra de Vietnam, conflicto que se dio entre los años 1959 y 1975 en el marco de la Guerra Fría, cuyo objetivo era impedir la reunificación del citado país bajo un gobierno socialista, que enfrentó a la República de Vietnam del Sur y su aliado Estados Unidos contra la República Democrática de Vietnam Norte apoyada por la Unión Soviética y China.
Un recorte de periódico cuenta como el venerable monje Tich Quang Duc se prende fuego en una calle de Saigón como protesta por los graves crímenes de la pandilla yanqui-títere.
En la planta alta, abren con la presentación de una lona con imágenes de la escena musical en México en ese año. Entre otros se puede ver a Angélica María, Leo Dan, Raphael, Marco Antonio Muñiz, Julio Iglesias, Johnny Laboriel, Los Rebeldes del Rock, Leonardo Favio, Sandro de América, Palito Ortega, Los Teen Tons, Los Rockin Devils, César Costa y Alberto Vázquez.
Ahí, los visitantes pueden oír las canciones que se promovieron ese año.
En otra área hay una amplia muestra de la vida cotidiana, ello incluye anuncios y promocionales sobre diversos productos. Incluso está en exhibición un televisor Samsung a color fabricado entre 1966-1967.
En otra sala, hay fotografías del 13 de agosto de 1968, cuando un contingente de poblanos acudió al entonces Distrito Federal para participar en una manifestación.
De igual forma, hay una copia de la carta que le enviaron el 14 de octubre del 68 al director Federal de Seguridad para notificarle que todas las escuelas y facultades de la Universidad Autónoma de Puebla, así como las escuelas Técnica Industrial número 16 y 17 se encontraban en huelga; así como los nombres y actividades de los líderes estudiantiles de la UAP.
También hay una foto de los presos políticos del movimiento estudiantil: Tomás Cervantes Cabeza de Vaca, Marcelino Perelló, Raúl Álvarez Garín, Eduardo Valle Espinoza, Salvador Martínez della Roca, Ana Ignacia Rodríguez, Roberta Avendaño Martínez “La Tita”, Giberto Guevara Niebla, Roberto Escudero Castellanos, Joel Arriaga Navarro, Félix Hernández Gamundi, Pablo Gómez Álvarez, Sócrates Amado Campos Lemus y Ayax Segura Garrido.
En el siguiente pabellón, cuentan los enfrentamientos entre los estudiantes de las vocacionales 2 y 5 del Instituto Politécnico Nacional (IPN) y los de la preparatoria “Isaac Ochotorena”, incorporada a la UNAM. La ocupación de la policía y el ejército a los planteles escolares de la Preparatoria Nacional y del IPN. Esto en julio.
También, hay copias de los volantes y manifiestos, así como de páginas de algunos periódicos de la época.
Complementa ese recinto la reproducción de corridos y canciones alusivas, interpretadas por Óscar Chávez.
En el siguiente módulo exhiben fotografías que muestran las marchas y manifestaciones que se registraron en fechas posteriores.
Asimismo, las gráficas detallan las detenciones, defunciones, labores de búsqueda y manifestaciones posteriores a la tarde noche del 2 de Octubre.
Se remata con un televisor que proyecta películas y filmes del tema.
Gloria Tirado Villegas señala en una introducción que se puede leer en una de las paredes del recinto: “En 1968 en París, Praga, Estados Unidos, hasta Chile asistimos a una gran revolución cultural protagonizada por los jóvenes. Una insurrección contra una manera de ser y gobernar se convirtió en resistencia y crítica a las instituciones, al gobierno, a la familia, en suma al status quo, a la sociedad de consumo. Se hizo poesía y política en la ciudad, en las calles y en donde el orden establecía que no se debía hacerlo. Ni unirse al diálogo, ni a la fraternidad y al amor de una rebelión que, en primer lugar, tenía parte en las conciencias y en los corazones”.
Agrega: “La revolución sexual recorrió París, ahí las feministas anarquistas se quitaron el brassier como símbolo contra la opresión, y esto se convirtió en un símbolo de resistencia que recorrió el mundo con el lema ‘Prohibido prohibir’. La revolución cultural se filtró en los clubes de estudio, en los cafés, las cantinas, los barrios a través de libros y lecturas que hablaban de eso. Como nunca antes se conoció lo que ocurría en otros países, la lucha de los Panteras Negras, la aprehensión de Eldridge Cleaver y de Angela Davis. Las lecturas fueron un catalizador: se leyó marxismo, maoísmo, psicoanálisis; se abrieron las conciencias y la atención de los jóvenes se concentró en una intensa discusión entre distintas corrientes filosóficas. Sartre, Camus, Simone de Beauvoir, que con su libro ‘El segundo sexo’ removió una concepción de la historia”.
Amplia: “La comunicación jugó su papel, la prensa internacional informó de los acontecimientos. La contraviolencia estudiantil surgió para defenderse de la violencia del Estado. Se desempolvó el marxismo para buscar otras interpretaciones; recorrió aulas, panfletos, volantes y nutrió cambios en programas de estudio. En algunos países hubo enfrentamientos con la policía, con los granaderos y hasta con el ejército.
“Los 68”, como tituló su libro Carlos Fuentes, resume esa conmoción que cimbró varios países del mundo, con sus diferencias “El Mayo Francés” no fue contra un gobierno sino contra un futuro predeterminado. Una gran diferencia es que ningún otro país se llegó a la represión que se vivió en México.
1968 fue un parteaguas en Occidente y esta exposición en el Museo de la Memoria Histórica Universitaria nos permite asomarnos a ese movimiento y comprobar, cincuenta años después, cómo en ese icónico 68, empezamos a cambiar el mundo”.
Aunque está dirigida a todo público, se invita a escuelas secundarias y preparatorias a que recorran esta exposición.
“1968 a través de la memoria” estará abierta al público hasta el 4 de noviembre, en el Museo de la Memoria Histórica Universitaria, ubicado en la 3 Oriente número 1008, en el barrio de Analco. La entrada tiene un costo de diez pesos.