Errores que darán un Buen Fin a tu cartera

El entusiasmo con el que se vive el Buen Fin consolida la popularidad del evento que año con año atrae a más mexicanos. Siendo hoy el tercer día de promociones, muchos compradores ya salieron a cazar sus productos, mientras que otros aprovecharán el puente para buscar las últimas ofertas en los anaqueles.

A pesar de que iniciativas como ésta logran reactivar la economía de la población, la mala administración financiera, principal motivo de endeudamiento en el país, se transforma en acciones más concretas que llevan a varios consumidores a una terrible resaca financiera. Es decir, muchos mexicanos comenzarán a impulsar su cuesta de enero desde hoy.

Aunque existen varios factores que impactan la salud económica de los consumidores, tales como las secuelas del regreso a clases, hemos detectado que los principales errores que las personas cometen con su dinero durante el Buen Fin son la falta de planeación financiera, la poca precaución en el uso de sus créditos y no advertir compromisos futuros.

Para entender mejor cada uno de estos escenarios, basta con analizar los resultados de la encuesta que lanzamos hace unos días; en ella, descubrimos que 57% de los compradores en este fin de semana lo hicieron sin prever el gasto. Es decir, haciendo caso omiso a lo aprendido con la alcancía, la mayoría ocupó el dinero que tenía disponible al momento.

¿Cuáles serían las consecuencias de actuar así? Pensando en un escenario ideal, los consumidores medirían sus compras y determinarían un tope saludable que no comprometa otras áreas de sus vidas, pero la realidad es otra.

Alrededor de 6 de cada 10 proyectaron un ticket por hasta 5 mil pesos y, considerando que el ingreso promedio de los encuestados fue de 9 mil 600 pesos, un gasto por dicha cantidad representaría más de la mitad de su salario.

Otro error recurrente es la poca precaución en el uso del crédito. A pesar de que esta forma de pago quedó por debajo del débito y el efectivo entre las opciones preferidas por los compradores, hubo un grupo de personas en el que mantuvo firmemente su dominio. ¿Sabes a quiénes me refiero? Así es, los deudores que no querían perderse el Buen Fin.

Aunque parezca sorprendente, casi la mitad de los participantes ya venía arrastrando adeudos con sus tarjetas y en 8 de cada 10 casos destinaban hasta el 30% de sus ingresos al pago de las mismas.

El escenario anterior nos lleva al último error, no advertir compromisos futuros. Tener deudas no

_ es solo adquirirlas en ese momento, si no llevarlas con nosotros por un periodo. En el caso de nuestros encuestados, la mayoría de los deudores liquidará en un plazo mayor a 3 meses. Es decir, seguirán pagando una vez terminado el Buen Fin, Navidad, Año Nuevo y hasta la Candelaria.

Arrastrar deudas es una práctica de casi la mitad de los consumidores que gustan de El Buen Fin