Como Rico McPato nadando en lana

¡¡¡Ooohhh, Zheenliii Yeee Gooonnn, ohhh Zheeenliii YeeeGooonnn!!!Esloquequierocantaralritmode...“Mi suegra llegó, tu suegra llegó”, de Los Teen Tops, porque han revivido a un personaje entrañable cuya imagen ligada a millones de dólares empaquetados en su nada modestamansiónsequedótatuadaenelinconscientecolectivonacional.Yesquecuandolosmexicanosescaneamosesa

billetiza, sin duda producto del trabajo fecundo y creador, se nos despertó una avidez solo comparable con la que puedes experimentar frente un trompo de pastor para ti solo.

Luego se armó un escándalo cuando uno de los más simpáticos, zhensitos y carismáticos secretarios de la era del ex presichente Calderón, un humanista de tiempo completo, Javier Lozano, quedó involucrado en esa historia: el empresario mexicano de origen chino lo señaló con una frase lapidaria, “Copelas o cuello”, alegando con dolo que lo extorsionaba.

Por supuesto el fino y culto personaje lo negó todo y las cosas se fueron calmando hasta llegar a “nadie sabe, nadie supo”. Se derramaronbuenasdosisdecortinasdehumo,JelipillosemetióensunarcoguerramientrasGarcíaLuna Productions montaba shows y Lozano andaba de compló en complósinquenadieexplicaraquépasócontodoesebilletote.

O sea, no es que uno desconfíe, pero no está mal que se sepan las coordenadas de ese dinero, no vaya a ser que estén en alguna cuenta secreta en Andorra como hizo el góber del Edomex, Alfredillo del Mazo (ojeis, como el personaje que es de uno de tantos ejemplos de cómo el Grupo Atracomucho siempre está al servicio de la comunidad).

Secretamente siempre quise que todos esos morlacos estuvieran metidos en una gran bóveda como la de Rico McPato para que los mexicanos pudiéramos echarnos una nadadita más bien de manera meramente terapéutica. A lo mejor sí construyeron esa bonita piscina, pero solo para las clases de zumba acuática para el gabinetillo de Jelipillo y a su Tumbaburrito con sus flotis.

Como quiera que sea, luego tuiteó el ex presichente Jelipillo que esos chorromil dólares, euros y billetes del banco de la ilusión, fueron invertidos en centros de lucha contra las adicciones. De haber sido cierto, la verdad, con ese presupuesto desde cuándo se habrían acabado los drogodependientes.

Cualquiera diría que alguien está nadando de a muertito en la pileta del billete grande.

Lozano andaba de compló en compló sin que se explicara qué pasó con ese billetote