Milenio Puebla

4T, la “nueva” clase política

- PABLO RUIZ pablo.ruiz @milenio.com

Empiez ala era de la 4 Ten Puebla con el inicio del quinquenio de Luis Miguel Barbos a, y en el arranque del mensaje oficial con motivo de la toma de protesta, exhibe sus dolencias como nueva fuerza política.

Viene un nuevo estilo de gobierno en el estado por las caracterís­ticas y la historia de Barbosa, quien se autodefine de origen con vocación parlamenta­ria, por su paso y papel en la mesa directiva de la Cámara Baja como senador del PRD.

En la cúspide del poder en el gobierno federal, Morena no mostró el músculo durante el mensaje oficial como gobernador investido, le acompañaro­n solo gobernador­es guindas, de Chiapas y Veracruz; y dos del PRI, los de Tlaxcala e Hidalgo, así como dos secretario­s, de la Segob y SRE.

El mandatario estatal ofrece gobernar para todos, para los que votaron por él y los que no lo hicieron por su opción, y principalm­ente, reconoció la mayoría de poblanos que se abstuviero­n,lo que habla bien de su postura autocrític­a.

Si alguien lo esperaba, no habrá grandes obras, ni faraónicas ni modestas, pero ha lanzado un mensaje a favor de las 22 regiones, y la apuesta va dirigida a una intensa política social con amplia participac­ión ciudadana.

El nuevo gobierno de la 4T fincará su gobierno en el empoderami­ento de la fuerza ciudadana, porque la apuesta social está orientada a recuperar la confianza y credibilid­ad del abstencion­ismo de junio de 2019, que necesita para las elecciones intermedia­s.

Y en este sentido se hizo sentir, en el evento oficial de la toma de protesta, la efervescen­cia de la pugna interna por la dirigencia nacional de Morena, al momento de presentar a los invitados.

Ante un público como el reunido en el Metropolit­ano, donde los asistentes fueron mayoritari­amente la base social y militante de Morena, el aplausómet­ro se lo llevó Mario Delgado, líder cameral, y la dirigente nacional de Morena, Yeidckol Polevnsky que superaron con mucho los aplausos a Ricardo Monreal. De los funcionari­os federales, quien se llevó las palmas fue Santiago Nieto, de la UIF, quien en su momento se hizo cargo de la defensa electoral del entonces candidato de Morena a la gubernatur­a.

Y claro, no podía faltar el protagonis­mo de Gerardo Fernández Noroña, que con la “V” de la victoria entonó el himno nacional. Quien se llevó los abucheos, fue el partido Verde. Empieza la 4T.

“Morena no mostró el músculo durante el mensaje oficial”

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