Reacomodo a whatsappazos
La salida de Fernando Manzanilla Prieto como titular de la Secretaría de Gobernación estaba más cantado que el Himno Nacional.
El secreto a voces recorría todos los días por el radiopasillo de las oficinas gubernamentales, y era el comentario de las reuniones de sobremesa de la clase política.
En el partido gobernante Morena sigue el reacomodo de grupos políticos para consolidar al hegemónico al que solo falta el Poder Judicial, luego de asumir el control de otras instancias como la Auditoría Superior del Estado y el que está por ocurrir con la Fiscalía General.
Los ajustes han pasado por meter orden en gobiernos municipales, como ocurrió en Tehuacán, que tiene en prisión a Felipe Patjane, y en la mira de este reacomodo están la alcaldía poblana y la máxima casa de estudios.
Llama la atención la forma en que se realizan estos reacomodos “normales” en los grupos políticos en el ejercicio del poder, como ocurre ahora en la era de la Cuarta Transformación.
Destaca en lo particular la divulgación pública de conversaciones privadas de funcionarios públicos, jueces, magistrados, políticos, empresarios y periodistas.
El mensajero de tales revelaciones de las presuntas conversaciones privadas de los chats en WhatsApp no está en el centro del cuestionamiento, lo relevante es la sospecha fundada de que el espionaje
MORED/ telefónico y político ilegal, sin que se conozca a la fecha quién lo realiza.
La ironía de esta práctica ilegal sigue vigente, con la novedad de que a quienes se acusaban de realizar escuchas en el pasado, fueron “pillados” ahora, de resultar cierto, el chat entre Fernando Manzanilla y Eukid Castañón.
El año pasado, con el inicio de la nueva administración, se publicaron conversaciones privadas del chat de WhatsApp, presuntamente, entre el periodista Rodolfo Ruiz y el ex titular de Puebla Comunicaciones, para reventar el presunto complot contra la jefa de prensa del gobierno. Le siguieron las publicaciones de presuntas conversaciones privadas entre magistrados del Tribunal Superior de Justicia; invadidos en su privacidad, los garantes de la justicia no procedieron a denunciar los hechos.
A la “renuncia” de Manzanilla a Gobernación, le antecedió la divulgación de un chat con el ex diputado Eukid Castañón. Son hechos ocurridos en la era de la 4T.
El mensajero no está en el centro del cuestionamiento