Funerarias, otro posible fin de los 43 normalistas
Una posibilidad sobre el destino de los 43 alumnos de la Escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos es que hayan terminado en crematorios y no en el basurero de Cocula, como señala la “verdad histórica” de Jesús Murillo Karam, detalla el informe de la Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia del Caso Ayotzinapa.
La hipótesis se basa en dos declaraciones. Una menciona que los alumnos fueron llevados a la funeraria El Ángel, cuyos crematorios están en la salida a Chilpancingo y en el centro de la capital de Guerrero.
Ahí supuestamente fueron cremados a partir de las tres o cuatro de la mañana del 27 de septiembre hasta el día siguiente, aunque según la declaración hubo cuerpos que no fueron consumidos en su totalidad.
En el traslado y cremación participaron, presuntamente, Eduardo Joaquín Jaimes, El
Gabriel León Villa, La y gente de confianza de Nicolás Nájera Salgado, El May, de quien se presume estuvo en el lugar junto con Los Tilos.
“A dichas personas les habrían sido entregadas las cenizas para ser dispersadas en lugares colindantes a Iguala”, se indica en el documento.
En otra fuente, el declarante asegura que supo por parte del sicario de Guerreros Unidos, Felipe Rodríguez, El Cepillo, que los 43 fueron divididos en tres grupos, uno de ellos entregados a la Policía Municipal de Iguala y trasladados a una funeraria en El Cayaco, Acapulco.
LaCovajmencionaquedictámenes del Equipo Argentino de AntropologíaForenseaseguran que los huesos hallados en el basurerodeCoculateníancaracterísticasquecoincidenconrestos que han sido cremados.
Por ello, analizaron comunicaciones telefónicas alrededor de las funerarias. En Iguala solo hay dos establecimientos que ofrecen el servicio de cremación: El Ángel y Gutiérrez.