“A mi hijo se lo llevaron los narcos para vender droga”
Familiares de desaparecidos señalan al CJNG de plagiar a sus parientes, quienes salieron a comprar ropa o de paseo, pero fueron retenidos y forzados a trabajar en Nayarit, Michoacán, Zacatecas y Jalisco
Indagaron, se arriesgaron y se tienen indicios de que a Joaquín lo tienen vendiendo droga en las comunidades de Zacatecas y Jalisco, o que los últimos rastros de María de los Ángeles llegan a Aguililla, Michoacán; también sus parientes registran que un integrante del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) pidió que dejaran de buscar a su hermano Alejandro, quien fue visto por última vez en Tonalá, Jalisco.
Las tres denuncias que describen estas desapariciones están focalizadas en Nayarit, Tepic, donde las víctimas salieron para buscar trabajo, comprar ropa o simplemente a pasear.
MILENIO tuvo acceso a testimonios de madres y hermanos cuyos familiares fueron víctimas del Cártel Jalisco Nueva Generación, pero también de la indolencia y negligencia de las distintas fiscalías estatales. Las propias investigaciones de estas familias documentan que sus consanguíneos fueron capturados por el crimen organizado.
En Nayarit, Michoacán, Zacatecas y Jalisco, el CJNG expande sus dominios. Una forma de operar y reforzar su capital humano y operativo es “levantar” a jóvenes con fines de esclavitud, para que vendan droga y realicen actividades de sicariato, probablemente con fines de trata, en las zonas serranas.
El viacrucis de los familiares de las personas “levantadas” es recorrer fiscalías sin encontrar respuestas, pero sí mucha negligencia y omisiones.
A sus víctimas, después de un adiestramiento, el cual incluye torturas y golpes, el único estímulo a modo de paga que les da el cártel es: “trabajas, sí o sí, en caso de que quieras que tú y tu familia sigan con vida”.
“Lo estamos adiestrando”
JoaquínGómezOrozco,de17años, era estudiante de preparatoria en el área de programación; salió de sucasa,ubicadaenlacapitaldeNayaritel30demarzode2023.Llevaba una solicitud de empleo que le ayudó a llenar su madre y se dirigía a las tiendas Coppel y Cuidado con el Perro para laborar y reforzar el ingreso familiar previo al periodo vacacional. No se sabe si consiguió el empleo, pero el hecho es que no volvió a casa.
Desde hace nueve meses su madre lo busca, Alejandrina Orozco Romano, quien interpuso la denuncia NAY/TEP/ CI/01774/2023 en Tepic. La querella fue turnada también a Zacatecas, donde las autoridades se declararon “incompetentes”.
“Cuando fui a registrar la denuncia, me dijeron en la fiscalía: ‘A lo mejor su hijo se fue de vacaciones’. ¡Mi hijo nunca faltaba a dormir!, junto con sus amigos distribuimos en Tepic mil fichas de búsquedas… Un joven se me acercó en avenida México y Allende para decirme: ‘¿Es su hijo Joaquín Gómez?, a él se lo llevó la gente del cártel a Tala, Jalisco’”.
Días después, un desconocido dejó un mensaje de texto en el celular de la hermana de Joaquín, el cual señalaba que estaría tres meses “incomunicado” y “adiestrando” en Tala, Jalisco, pues trabajaría para el cártel: “Ustedes espérense, él se va a comunicar”.
Alejandrina no pudo obtener más información; sin embargo, luego de una semana de incertidumbre. El 7 de abril, su celular sonó; era Joaquín, con voz temerosa, fue directo al punto: lo tenían “trabajando”, vendiendo droga en El Obraje, Zacatecas, y otras localidades en Los Pinos y Ojuelos, así como de las zonas serranas de Jalisco.
“Me pidió ayuda. Me pudo marcar porque quienes lo tienen retenido habían bajado a comprar a un Oxxo; estaba bajo el mando de un comandante de origen colombiano que lideraba varias estructuras. Hablamos como 15 minutos. Me marcó de un número desconocido, ese día estuvimos conversando en diversos momentos, pero desde ahí, ya no he vuelto a saber de él”.
Salió de paseo
María de los Ángeles Herrera, de 26 años de edad, salió de su casa el 7 de diciembre de 2020, en un viaje de paseo desde Tepic a Aguililla, Michoacán. Pero lo último que María Guadalupe Herrera, su madre, supo de ella, fue que hizo una parada en Antúnez, Michoacán, para dejar su maleta en casa de una prima, y de ahí salió a hacer una simple recarga telefónica. Luego de eso seguiría su camino hacia Aguililla —a 105 kilómetros de ahí—, pero ya no regresó. Su maleta sigue esperándola.
“Por medio de mi sobrino supe que mi hija sí llegó a Aguililla, no se quedó en Antúnez, y él me dice que los del cártel los levantaron a los dos. Al muchacho lo regresaron muerto y a mi hija no la volvieron a ver”.
A la casa de la familia Herrera han llegado telefonemas extraños, con clave Lada oriunda de Michoacán. Por ahora las carpetas de investigación NAY/ TEP/111/CI/24092020 y CEAV/ DR//ATTM/4414/2023 no muestran avance alguno.
Iba a comprar ropa
Las madres distribuyen fichas de búsqueda y realizan su propia investigación para saber del paradero de sus hijos
Desdeel10demayode2023,Claudia Laguna González, de 41 años, no sabe nada de su hermano Alejandro, quien salió rumbo a Tonalá, Jalisco, para comprar ropa y accesorios para después venderlosenNayarit,peroalafechanosabe nada de él.
De acuerdo a las propias investigaciones de Claudia, las cuales señalan que su hermano de 28 años fue “levantado” por el CJNG en una lonchería de Tonalá.
En las carpetas de investigación NAY/TEP/CI/2044/2023 en Nayarit y en la CI/40093/2023 de Guadalajara, Jalisco, se consigna que hubo una llamada de amenazas a otra hermana de Claudia, en la cual una persona que se identificó como personero del CJNG les pedía dejar de buscarlo, de interponer denuncias y de hacer ruido del caso o acabarían muertos.
La familia repartió fichas de búsqueda en municipios de Jalisco y publicaron su foto en grupos de búsqueda de Facebook, a ello,
_ testigos contactaron con los buscadores y les confirmaron que Alejandro desayunó el 10 de mayo en una lonchería de Tonalá, cuando fue “levantado” por perdonas que trabajan para el CJNG.