Ex maratonista, al frente de la Medicina Deportiva BUAP
Sergio Jiménez Cancino es médico cirujano originario de San Juan Ixcaquixtla
Sergio Jiménez Cancino, ganador demaratonesinternacionales,entrenador y médico cirujano partero, es responsable del Laboratorio de Medicina Deportiva en la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), donde impulsa y comparte sus conocimientos con atletas universitarios y del público en general.
El atleta originario de San Juan Ixcaquixtla, en la parte sur del estado de Puebla, cuenta con más de 20 años de experiencia en el atletismo y como parte de sus logros, sumó los primeros lugares en los Maratones Internacionales de Chicago en 1992; Los Ángeles, California, en 1991; y en San Francisco en 1992.
Jiménez Cancino, el campeón nacional en 1992 y mundial en 1995 en la prueba de cinco mil metros, cuenta con una especialidad por parte del Comité Olímpico Internacional en Entrenamiento y Ciencias Aplicadas al Deporte.
Sergio Jiménez cursó sus estudios de nivel medio superior en la Preparatoria Alfonso Calderón Moreno; posteriormente, ingresó a la carrera de Medicina en la BUAP y, actualmente, es uno de los académicos más reconocidos en la institución.
Formación y apoyo a alumnos
En la actualidad, el ex maratonista está al frente del Laboratorio de Medicina Deportiva que busca formar, desarrollar y apoyar a deportistas, tanto universitarios como de diferentes partes del estado a partir de la aplicación de la investigación y de los resultados de diferentes análisis.
Las instalaciones universitarias permiten realizar estudios de laboratorio y dar un sustento y apoyo a los entrenadores, con lo que, resultan beneficiados los deportistas y, en general, todos los universitarios, explicó.
“Se está trabajando y el chiste es que tengamos el laboratorio lo más completo posible, mínimo indispensable para poder evaluar tanto a nuestros deportistas representativos, como a atletas de alto rendimiento”, expresó el ex maratonista.
De manera adicional, se apoya el trabajo de la Facultad de Cultura Física, ya que con los estudios de laboratorio se abre la posibilidad del desarrollo de la investigación científica que puede llegar a todos los ámbitos.
El Laboratorio de Medicina Deportiva de la máxima casa de estudios cuenta diversos equipos como de cardiología y cicloergómetro, este último para medir fuerza y diagnosticar lesiones en los deportistas, comentó Sergio Jiménez Cancino, quien invita a la población en general a realizar actividades físicas.
“Se ha ido montando poco a poco el laboratorio consta del área de estomatología, del área de psicología, del área para hacer el consultorio, para la histórica clínica, el electrocardiograma en reposo. Hay la parte de nutrición, la parte de fisioterapia, de varios elementos que son importantes para la evaluación de nuestros equipos representativos”, explicó.
De manera adicional, las instalaciones de la BUAP cuentan con áreas de bioquímica para análisis clínicos, de atención psicológica y los consultorios dental, médico y de nutrición, espacios que apoyarán no sólo a los entrenadores y atletas de la institución, sino también a los deportistas poblanos.
En las instalaciones universitarias se puede analizar el nivel de creatinkinasa, es decir, de una vía metabólica que aporta energía de forma inmediata, por lo tanto, predomina en esfuerzos físicos de alta intensidad y corta duración.
“¿Por qué es importante esto? Porque los exámenes de sangre nos dan la parte nutricional, nos da el volumen de entrenamiento, nos da la intensidad del entrenamiento y nos da la sesión de entrenamiento. La sesión de entrenamiento, esa la sacamos con el ácido láctico; la intensidad del entrenamiento la sacamos con la creatinkinasa. Hay creatinkinasa, hay cardiaca y muscular; y la urea que nos da el volumen”, apuntó.
Las instalaciones se están dando los primeros pasos para ayudar a los entrenadores y deportistas, puesto que se tienen a miles de potenciales atletas en la máxima casa de estudios del estado, explicó Jiménez Cancino, deportista que coincide en que se puedan alcanzar las metas, siempre y cuando la persona sea disciplinada y perseverante.
“Es una gran oportunidad y es como el tener la oportunidad y la posibilidad de compartir un poco de conocimiento, un poco de experiencia el poder traer a algunos de compañeros médicos o de amigos médicos o de quienes fueron mis médicos, de quienes fueron mis asesores que ahora ellos son de amplia experiencia, de mucho fogueo”, finalizó.