En Puebla: Primor vs Yunke
El viernes por la noche los aspirantes morenistas a la alcaldía de Puebla fueron citados en las oficinas de Morena ubicadas en la avenida Ejército Nacional número 539, a una reunión a media mañana del sábado donde darían a conocer el resultado de la “encuesta”, que nadie vio, donde les informaron que José Pepe Chedraui había ganado.
Aunque se supone nadie conocía el veredicto, en las redes sociales algunos compañeros periodistas como Alberto Rueda un día antes sabían que la decisión estaba tomada, y que el empresario poblano era el elegido, como finalmente sucedió.
Algo que también pronosticó Rueda en su cuenta de X (antes Twitter) era que Claudia Rivera sí tenía su plan B, que aseguran es una candidatura plurinominal al Senado, que luego se vioreflejadaensurostro durante la foto oficial de los contendientes.
Al analizar la lista inicial, y la modificada, de las diputaciones federales, nos podemos dar cuenta que muchos de los que ahí están tienen méritos políticos, pero no militancia partidista, y que una vez más llegan por otros factores que nada tienen qué ver con el arraigo en el movimiento del presidente Andrés Manuel López Obrador quien por cierto, nos visita desde ayer.
Esa es la queja más recurrente de los cientos de militantes en todo el país,
Claudia Rivera sí tenía su plan B, su candidatura al Senado
que ingenuamente pensaban que había democracia y espacios para poder participar, a diferencia del viejo PRI donde el amiguismo, el compadrazgo y la venta de puestos era común.
Una vez despejadas sus dudas, los morenistas en Puebla pueden estar seguros que nada de eso es verdad, y que como en el tricolor, hay intereses, y compromisos que se cumplen, aún a costa de los fundadores y aquellos considerados de “hueso guinda”.
Donde la “sangre azul” sí cuenta es en el PAN y sus aliados PRI y PRD,porqueenelestado la mayoría de los cargos se repartieron entre los del llamado grupo del Yunke, del cual Eduardo Rivera es miembrodistinguidodesdehacedécadas. Lo que en el estado se espera es un
_ encontronazo de pronóstico reservado entre el combinado del Primor (PRI y Morena), contra la línea pura del blanquiazul que no dejó entrar a los neopanistas y mucho menos a los descoloridos priistas.