Despiden con caravana a Obed Beltrán Sánchez
Después de 29 horas, el migrante asesinado, fue trasladado en carroza a la parroquia del Sagrado Corazón
Este lunes una caravana de automóviles que seguían de cerca a la carroza que llevaba el féretro con los restos de Obed Beltrán Sánchez, despidió con música y flores al migrante mexicano asesinado el pasado 11 de febrero, cuando se encontraba en la estación del metro Mount Eden del Bronx en Nueva York.
La despedida de su hogar fue dolorosa, pues después de dos años en los que estuvo ausente, volvió a estar por última vez con los suyos, permaneciendo junto con los que los que lo vieron crecer alrededor de 29 horas. Los restos de Obed fueron transportados en una carroza que lo llevó a la parroquia del Sagrado Corazón, dejando un vacío en la vida de todos sus seres queridos.
Cultivar valores
En la misa de cuerpo presente, el sacerdote oficiante lamento que se esté viviendo en la cultura de la muerte y no de la vida, reiteró que se ven series que promueven la violencia y los antivalores, “por eso los invito a trabajar por una cultura de la vida, no podemos seguir por este camino, que tanto daño hace a la sociedad”, dijo a los feligreses ahí reunidos.
Al continuar con el discurso, el sacerdote insistió en que la sociedad, sin darse cuenta se ha quedado en el fondo del camino, dejándose doblegar por la codicia, avaricia, vanidad, rencillas, además, del dinero fácil.
Por otra parte, dedicó un mensaje a los padres de familia, reiterando que les toca trabajar por una cultura de la vida con sus hijos, inculcarles valores humanos y cristianos, el amor, respeto, la ayuda, obediencia, honestidad, y que aprendan a decir que no a la violencia, a los vicios y a las sustancias prohibidas.
Asunción Beltrán, tío de Obed, quien fue abordado por medios de comunicación a unos metros del panteón, dijo que como familiar del hoy difunto, lo que más le preocupa son las dos niñas que quedaron huérfanas, “porque no es lo mismo un hogar sin un pilar, es un poco débil, por eso vamos apoyar a mis sobrinos, hermano y mamá”, compartió.
Definió a Obed como una persona sencilla, “con el conviví desde su niñez, era trabajador, a veces Diosito se lleva a gente buena”, indicó su familiar.
Entre los recuerdos más alegres que tiene de su sobrino, esta la fecha en la que se casó, al igual que cuando nacieron sus niñas, “es lo que nos preocupa, ellas siempre esperaban a su papá con comida y con otras ilusiones, esta situación es muy triste”.
Cabe destacar que Obed Beltran Sánchez, trabajaba en la industria de la construcción en Nueva York, llevaba dos años fuera de su hogar; durante este tiempo no dejo de tener comunicación con su esposa e hijas, con quienes diariamente hablaba por teléfono dos veces al día.
Regularmente se comunicaban por la mañana y tarde. Fue el 12 de febrero, cuando Samantha, esposa de Obed, estaba hablando con él, cuando de pronto escuchó que su pareja no podía articular palabras, cortó la comunicación y decidió llamar nuevamente; en esta segunda ocasión una persona que hablaba inglés le contestó y trató de explicarle la situación, sin embargo, Samantha no logró entender nada.
Más tarde, optó por llamarle al hermano de su esposo para preguntarle sobre la situación y asegurarse de que Obed estuviera bien, desafortunadamente, fue este quien le informó que el poblano había fallecido al recibir el impacto de una bala, disparada por los integrantes de dos bandas de pandillas que se enfrentaron en el metro del Bronx.