Alerta en Tlaxcala por el síndrome Guillain-Barré
La Sesa dijo que hay 18 casos sospechosos, de los cuales 8 han sido confirmados en Santa Cruz, Calpulalpan y la capital
La Secretaría de Salud (Sesa) de Tlaxcala emitió una alerta epidemiológica tras detectar en su población 18 casos sospechosos del síndrome de Guillain-Barré (SGB), un trastorno que ataca a los nervios mediante el sistema inmunitario del organismo.
La Sesa indicó que hay ocho casos confirmados entre los municipios de Santa Cruz Tlaxcala (tres), Tlaxcala (dos) y Calpulalpan (dos), y ordenó un reforzamiento de los protocolos de salud en sus unidades médicas para que los pacientes que cumplan con los síntomas sean canalizados a tiempo.
Esta enfermedad se manifiesta con síntomas como debilidad y hormigueo en las manos y los pies, pero que se extenderán rápidamente para paralizar todo el cuerpo conforme pase el tiempo.
“La forma más grave del síndrome de Guillain-Barré se considera una emergencia médica. La mayoría de las personas con esta afección deben ser hospitalizadas para recibir tratamiento”, señaló la dependencia tlaxcalteca.
Aunque no se conoce cuál es la causa precisa de lo que provoca el síndrome, dos terceras partes de los pacientes bajo observación en Tlaxcala manifestaron síntomas de infección en
las seis semanas anteriores, como covid-19, de las vías respiratorias o gastrointestinales, o el virus de Zika.
La Secretaría de Salud de Tlaxcala abundó que los síntomas pueden ser los siguientes: sensación de hormigueo en los dedos de las manos, de los pies, los tobillos o las muñecas, así como debilidad en las piernas que se difunde a la parte superior del cuerpo.
También existe incapacidad para caminar o subir escaleras; dificultad con los movimientos faciales, lo que incluye hablar, masticar o tragar, visión doble o incapacidad para mover los ojos; dolor fuerte, que puede ser sordo, fulgurante o similar a un calambre, y que puede empeorar en la noche.
_ Además, finalizó que ot ro síntoma es la dificultad para controlar la vejiga o la función intestinal; frecuencia cardíaca acelerada; presión arterial alta o baja y dificultad para respirar.