Fenómeno majestuoso
Cientos de poblanos se dieron cita en el zócalo para apreciar el eclipse, los asistentes catalogaron a este fenómeno natural como algo majestuoso y único en la vida. Multimedios Puebla realizó un sondeo entre los asistentes, quienes señalaron que no se podían perder esta oportunidad, pues no saben si van a poder repetir la vivencia. Además que superó sus expectativas y consideraron como un evento majestuoso que se pudo apreciar en el cielo poblano. En todo momento se vivió un ambiente de compañerismo, pues los lentes y visores especiales se prestaban a los que no llevaban para que todos pudieran disfrutar del espectáculo. sus tres hermanos menores, a quienes instruyó debido a que algunas escuelas descartaron esta actividad para los aprendientes.
La gente mayor opinó sobre este fenómeno y garantizó que el escenario que se suscitó en 1991 fue totalmente distinto, ya que se oscureció totalmente, causó confusión en la fauna e incluso fue más visible.
En punto de las 12 de la tarde el panorama cambió y la intensidad del sol disminuyó, lo que causó gran emoción en los asistentes que no desaprovecharon el momento de grabar y tomar una fotografía de recuerdo con el telescopio solar.
Talleres y música
Con actividades lúdicas, música y talleres, decenas de familias y turistas presenciaron el eclipse solar que en Puebla se registró a un 70 por ciento.
El fenómeno astronómico que transcurrió durante casi tres horas, capturó la atención de capitalinos de diferentes edades, quienes se dieron cita en la explanada del mercado “El Alto”, uno de los barrios más antiguos de la ciudad, para apreciar el evento a través de telescopios y lentes especiales.
La jornada de observación estuvo a cargo del Consejo de Lectura Puebla, así como de integrantes del Club de Física de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) quienes explicaron a las personas la forma correcta de observar el fenómeno.
Universitarios particpan
Cientos de estudiantes de diversas universidades disfrutaron el eclipse solar, toda vez que en sus instituciones se colocaron telescopios, lentes y cajas especiales, para admirar el fenómeno natural.
En la BUAP, el eclipse fue observado a través de telescopios equipados con filtros adecuados, colocados en la explanada norte de la Torre de Gestión Académica y Servicios Administrativos y en el CCU, donde estuvo presente la rectora, Lilia Cedillo.
Mientras, en la explanada del Upaep, becarios se dieron a la tarea de instalar telescopios y lentes, para la comunidad universitaria, así como aquellos ciudadanos de la zona que acudieron a la universidad.
En la Universidad Iberoamericana y la Udlap también se sumaron a esta actividad y tomaron un receso para salir y mirar el eclipse con lentes y telescopios.
Grupo de expertos preparó visores
Los habitantes de Tlaxcala también miraron el eclipse total de sol, las fuentes de la parroquia de San José se convirtieron en un punto de observación para este fenómeno natural; ya que el grupo “Eclipses México” contó con cajas oscuras, visores especiales y telescopios, los cuales fueron ocupados por decenas de personas de todas las edades, quienes fueron abandonando la zona, luego de que ocurriera este acontecimiento astronómico. Por otro lado, la Secretaría de Educación Pública del Estado (Sepe) dio a conocer que la inasistencia a las escuelas fue de alrededor del 90 por ciento, debido a que los padres no enviaron a los menores para evitar que estos mirarán de manera directa el fenómeno.
Club Astronau habilitó telescopios El eclipse solar registro concurrencia en los tres puntos que se dispusieron para observar este fenómeno astronómico, las clases y al ser un día laboral, no fueron factores que influyeron principalmente para los jóvenes, que destinaron tiempo para ver de manera segura, dijo José Manuel Muñoz Alvarado, del club Astronau. En esta ciudad hubo tres sedes que se habilitaron con telescopios y gafas, estas últimas con las características que marca la norma de seguridad, para que las personas pudieran ver el eclipse sin poner en riesgo su vista, estos fueron en el Museo de la Evolución, en la Universidad Tecnológica de Tehuacán y el Instituto Tecnológico.