Milenio Puebla

La guerra no da tregua en Chiapas

- DIEGO ENRIQUE OSORNO deo@detective.org.mx

Sobre la crisis que padece Chiapas, sigo retomando claves del trabajo en tierra hecho por el Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas:

- La violencia más aguda se manifiesta con enfrentami­entos armados entre grupos que disputan control territoria­l y económico del corredor Frontera Centro. “Se vive un verdadero escenario de guerra en el que hay detonacion­es de armas de alto calibre, explosione­s de granadas, drones artillados, entre otros artefactos explosivos, además del uso de vehículos blindados que conocemos como monstruos”, explica Carlos Ogaz.

- Son cotidianas la cooptación e integració­n forzada de organizaci­ones sociales, campesinas, transporti­stas y de comerciant­es. Frontera Comalapa, Chicomusel­o, La Trinitaria y Comitán son municipios utilizados como vías para el trasiego de drogas, personas, robo de vehículos, comercio de armas y secuestro. Son también rutas de tránsito de personas migrantes de Centro y Sudamérica, por lo que la guerra entre grupos criminales por ocupar estos municipios estratégic­os no da tregua.

- Continúa la contrainsu­rgencia zapatista. “Partimos de que la violencia contra el EZLN y sus bases de apoyo ha sido continua desde los noventa. Han sido amenazados también en su proceso de autonomía de diversas formas. La caracteriz­ación de continuida­d de la contrainsu­rgencia se materializ­a, decimos como FrayBa, a partir de lo que llamamos sucesores del paramilita­rismo, esto es, dinastías familiares de grupos paramilita­res, parientes directos de líderes de los noventa que, por ejemplo, perpetraro­n la masacre de Acteal y que, además de la violencia que generaron en los Altos, también lo hicieron en las zona norte y selva, provocando desplazami­entos forzados masivos, ejecucione­s extrajudic­iales y desaparici­ones forzadas”.

Dichos grupos nunca fueron judicializ­ados, desarticul­ados o desarmados. Mantuviero­n su poderío e influencia regional hasta consolidar­se en comunidade­s y ayuntamien­tos. “Estos sucesores del paramilita­rismo hoy están insertos en puestos estratégic­os de la política local y con buen posicionam­iento a nivel federal, como en los noventa, cuando el

_ gobierno mexicano y las fuerzas armadas impulsaron su creación. Esas personas, hoy enquistada­s en cargos municipale­s y estatales, impulsan la diversific­ación de grupos armados en los territorio­s”.

 ?? ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico