FRENO A OLA DE DESCONTENTO
Con diferencia de 2 a 1, Emmanuel Macron se impone en Francia
El centrista proeuropeo Emmanuel Macron, de 39 años, fue elegido ayer presidente de Francia —el más joven de su historia—, evitando así que esta potencia económica mundial cayera en manos del ultraderechista Frente Nacional de su rival, Marine Le Pen.
Con 90 por ciento del voto escrutado, Macron, que hoy presentará la dimisión como líder de su movimiento ¡En Marcha!, lideraba el recuento con 64.84% de los votos en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales, 30 puntos más que su rival, que logra por ahora 35.18 por ciento.
Será, así, la segunda victoria más holgada en una segunda vuelta desde tiempos de Charles de Gaulle. La primera la obtuvo el conservador Jacques Chirac en 2002 precisamente contra el ultraderechista Jean-Marie Le Pen, padre de Marine, cuando se impuso con 82 % de los sufragios.
Uno de cada tres franceses se abstuvo o votó nulo. Según los resultados del ministerio del Interior publicados a las 21 horas sobre 80% de los electores, la abstención alcanzó 24.52%, cifra más elevada que en la primera vuelta (22.63%) y la más alta en Francia desde 1969 (31.4%).
El ex banquero Macron reemplazará al socialista François Hollande, que renunció a presentarse a la elección por falta de apoyo popular y del que fue ministro de Economía. “Esta noche se abre una nueva página de nuestra larga historia. Quiero que sea la de la esperanza y la de la confianza recuperadas”, declaró Macron al conocer el triunfo. Con la “Oda a la alegría” de Beethoven de fondo, el presidente electo fue recibido por miles de franceses que coreaban “¡Hemos ganado!” ante la pirámide del Museo del Louvre de París, que resplandeció con luces doradas cuando el elegido al escenario previsto para la ocasión. “Esta noche, Francia ganó”, clamó ante aplausos y gritos de alegría. “Todo el mundo nos dijo que era imposible, pero no conocen a Francia”, añadió el joven político que hace tres años era un completo desconocido, antes de jurar: “Te serviré con amor”.
Después, su esposa Brigitte, una elegante rubia 24 años mayor que él, se unió en el escenario, sin poder contener las lágrimas. Ambos, junto a los hijos y nietos de ésta, a los que él considera propios, entonaron “La Marsellesa”.
El futuro presidente liderará una Francia dividida políticamente entre las zonas urbanas (privilegiadas y reformistas) y las desheredadas (tentadas por los extremos). Macron, que no parece recular ante los desafíos, tiene varios por delante como un desempleo endémico de 10%, la lucha antiterrorista y la crisis de la UE.
“Combatiré las divisiones que nos lastran”, declaró en un discurso solemne en su cuartel general de campaña antes de asistir al Louvre, asegurando que había escuchado “la ira, ansiedad y dudas” de sus compatriotas. Aunque Marine Le Pen, de 48 años, pierde por amplio margen, no es una derrota en rigor para ella ni el Frente Nacional, que logró convencer a más de un tercio del electorado con promesas contra la inmigración y el euro, situándose entre las principales fuerzas políticas de Francia.
Ambos candidatos mantuvieron una conversación telefónica “breve” y “cordial” previo a que se conocieran las primeras estimaciones oficiales, cuando el movimiento ¡En Marcha! de Macron encabezaba las intenciones de voto poco después de cerradas las urnas.
A la vez, según los sondeos de Kantar Sofres-Onepoint y Harris Interactive, ¡En Marcha! recibiría en los importantes comicios legislativos del 11 y 18 de junio de 24% a 26% de los votos, delante de Los Republicanos (conservadores, 22%), del FN (21 a 22%), la izquierda radical de Jean-Luc Mélenchon (13% a 15%) y el Partido Socialista hoy en el poder (de 8 a 9%). Macron, que asumirá el cargo a más tardar el 14 de mayo, espera obtener una mayoría absoluta para poder aplciar su programa.