Razones para que La roca sea presidente
Sí ya partimos de que nuestros amigos estadunidenses asumieron sus elecciones presidenciales como un concurso de popularidad y un enorme escenario para proyectar todos sus traumas y extrañas fijaciones, creo que nos podría (y con “nos” me refiero al globo terráqueo) ir peor que con Dwayne Johnson La Roca, quien acaba de decirle a la GQ que es una posibilidad real que eventualmente se aviente por la grande.
No nos engañemos. No es la primera vez que las elecciones de ese país parecen un circo, y claro que todo mundo debería estar pensando en quién es la persona más preparada para arreglar el inevitable caos y basurero mundial que va a dejar el personaje que ahora ocupa la oficina. ¿Pero aprenderán la lección? Si no lo hacen, aquí unas cuantas razones para tomar en serio al ex luchador.
No hay actor que haya entrevistado (y vaya que hemos tenido muchas oportunidades de hacerlo desde que apareció en La Momia), que sea más contundente contra del racismo. Y créanme, cuando ese hombre quiere ser contundente, nadie se pone a medir el tamaño de sus, mmm, manos como lo hacen con Trump. El Washington Post hizo un interesante análisis sobre las posibilidades que tendría el actor y concluyó que podría ganar. Estas, algunas razones que sabemos por leerlos a ellos y por más de quince años de entrevistar a este encantador tipo. Él siempre ha estado orgulloso de decir que es descendiente un hombre negro del norte que luchó en la revolución y más tarde contra la esclavitud. Pero la cosa se pone más interesante.
A pesar de lo que muchos creen, no todo Hollywood (menos Clint Eastwood y el horriblemente xenófobo Steven Segal) son demócratas. La Roca está registrado como republicano; sin embargo, cuando hablamos con él sobre el cambio climático, por ejemplo, durante los eventos de prensa de la película Terremoto dejó muy claro que el ser humano era muy responsable por lo que le estaba pasando a nuestro planeta. Claro, no adjudico la falla de San Andrés en las Californias a nuestras emociones tóxicas. Pero “hay mucho, por hacer, sin duda”, nos dijo. No es un discurso habitualmente tolerado en políticos republicanos.
Sin embargo, sí tiene mucho de ese allure que enloquece a los conservadores de aquel país. Por ejemplo, ¿creen que este es un hombre que saldría a abogar en contra del control de las armas? Uno de los principales factores por allá. Hoy y siempre.
Todo esto es parte de un análisis sobre el cómo esta figura impactaría políticamente ante una sociedad que tiene actitudes verdaderamente extrañas en ocasiones y, sin duda, un colegio electoral más anticuado que mi BlackBerry. Pero les voy a decir la razón por la cual creo que este hombre, si las cosas siguen como están, sería una opción mucho más amable para los nuestros.
Cuando estaba apenas haciendo la transición de luchador a héroe de acción en la pantalla, convirtiéndose en El Rey
Escorpión, platicamos largo y tendido. Y en esa entrevista su tema favorito no solo era la manera que le impactaba la resistencia de los luchadores mexicanos, sino cuánto admiraba su espíritu, ganas de innovar y pasión por lo que hacían. Y sí, ante la pregunta expresa la respuesta fue “por supuesto que soy fan de El Santo, he visto, creo, todas sus películas”.
Ok, está más padre para que siga siendo el actor mejor pagado del mundo que presidente, cierto. Pero honestamente el tipo siempre ha sido de una pieza y si Schwarzenegger y Trump ya cambiaron el juego, al menos este es un buen contendiente en la cancha.