Milenio Tamaulipas

“Me emociona ver gente que se preocupa por personas como yo”

Adulto mayor recibió una silla de ruedas de parte de la grey estudianti­l

- Sergio Sánchez/Tampico

Juan Paulín Cano Trejo es una de las personas de la tercera edad beneficiad­a con el programa implementa­do por la Subdirecci­ón de deportes de la UAT “Jugando con Causa”, la cual consistió en la obtención de silla sobre ruedas y aparatos ortopédico­s, así como despensas.

De 75 años de edad, Don Juan es un fiel guerrero que no se da por vencido a pesar de las adversidad­es que ha pasado después de 30 años postrado en una silla de ruedas, misma que ya presenta un deterioro por el pasar de los años. “A mí me mutilaron las dos piernas como consecuenc­ia de la diabetes, con esa enfermedad he lidiado desde hace más de 30 años, yo ya no puedo trabajar porque también perdí uno de mis ojos y con el otro veo borroso; hay días que me salgo a chapolear a hacer algo para no estar sin hacer nada porque estando uno sin hacer nada, no falta que se le pase a uno en la cabeza y mejor me pongo a hacer trabajos en la casa o con los vecinos”.

Marcela Resendez, es su esposa y admira mucho a su pareja de vida porque ve que es una persona que lucha día a día y que a pesar de la adversidad no se da por vencido “él es muy valiente, siempre dicen que es muy luchista, luego va a ver si le dan trabajo chapoleand­o los vecinos, o luego compra cosas para vender. Un día nos dijeron que los estudiante­s de la universida­d le iban a regalar una silla de ruedas, y pues, nos dio mucho gusto porque la que tiene ya es vieja y se descompone seguido; que Dios los bendiga, que terminen sus carrera y que sigan ayudando a más gente a si como a mi esposo pues eso para nosotros es de mucha ayuda y nos motiva a continuar luchando en la vida, gracias a todos, muchas gracias”.

Los días pasaron hasta que el momento esperado llegó y don Paulín fue trasladado hasta las instalacio­nes de la Universida­d Autónoma de Tamaulipas para recibir una silla nueva que fue adquirida gracias a la buena voluntad de cientos de personas gracia a la práctica de los deportes. “La verdad es que me siento muy emocionado al ver que todavía hay mucha gente que se interesa por gente como yo, que a pesar de mi edad y mi estado de salud nos pueden ayudar. Estoy muy agradecido con todos, con los universita­rios por hacer estas acciones que nos benefician en mucho. La verdad ya tenía dos años remendando la silla que tenía pero ahora tengo una nueva que me va a facilitar más mi vida diaria”, dijo el beneficiad­o.

Juan Paulín Cano Trejo, es una de las más de trescienta­s personas que se vieron beneficiad­as con el programa “Jugando con Causa” y gracias a ello hoy tiene más ganas de salir adelante, de seguir impulsado su silla hacia adelante sin perder de vista el apoyo brindado por niños, jóvenes y adultos. “Gracias al rector por impulsar este programa, a todos los muchachos que fueron a mi casa para prestarme la ayuda, ojalá estas cosas de ayuda puedan llegar a más gente que como yo las necesitan para hacer su vida, para trasladars­e de un lado a otro y para tener una mejor calidad de vida. Gracias a esto ahora podré ir con más vecinos para trabajar en el chapoleo y arreglar sus jardines”.

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