Ángel Mar, cuenta que
Muchos quieren elaborar este producto pero pocos encuentran el toque
La Asociación de Agentes Aduanales de Nuevo Laredo indicó que hay avances en las mejoras en el puente 3 “Del Comercio Mundial” tras los daños a la infraestructura que dejó la tormenta que se registró hace casi dos semanas. Actualmente se trabaja al 100 por ciento en importación pero aún se está al 75 por ciento en exportación. Los aduanales señalaron que hay un avance más en el proceso de exportación en el puente del Comercio Mundial, se trata de los productos regulados por la “FDA”, la cual refleja una notable mejora logística en este recinto internacional terrestre.
Explicaron que la FDA es la agencia del gobierno de los Estados Unidos responsable de la regulación de alimentos, medicamentos, cosméticos, aparatos médicos, productos biológicos y derivados sanguíneos, los cuales a partir de este 1 de junio se sumaron al notorio avance que el SAT y CBP han emprendido para recuperar las operaciones comerciales por el puente internacional 3.
Los horarios de operación en el puente continúan de siete de la mañana hasta la medianoche, o hasta el último tractor de la fila, compromiso que han cumplido en las aduanas de ambos Laredos.
El presidente de la Asociación de Agentes Aduanales de Nuevo Laredo, Edgardo Pedraza Quintanilla, dijo que el avance en el puente 3 ha superado expectativas gracias al apoyo de todas las autoridades involucradas en los procesos del comercio internacional en el país y refrendó una vez más que los Agentes Aduanales de Nuevo Laredo están comprometidos en seguir impulsando la competitividad de México en el plano mundial.
Destacó que el tráfico de importación trabaja al 100 por ciento por el puente Del Comercio Mundial, solo se trabaja en un 75 por ciento en materia de exportación y será en breve cuando se concluyan las obras de remodelación en el cruce para que se pueda nuevamente trabajar con normalidad.
Afirmó que por lo pronto se continúa con el apoyo de la Aduana de Colombia, Nuevo León, hasta que se restablezca completamente el servicio en el puente 3.
Será en breve cuando concluyan las obras para que se pueda nuevamente trabajar
n Tampico el oficio de panadero no es nada fácil y la muestra es que las nuevas generaciones lo intentan, pero solamente logran estar un par de días frente al horno, al último desisten por lo pesado que se vuelve una jornada de trabajo.
Ángel Mar se da un momento para salir, sentarse y refrescarse en un día normal en Tampico, con todo y sus más de 30 grados centígrados, que le saben a gloria en comparación a los 45 o 50 grados que se registran cerca de donde se cuece el pan.
“Muchos quieren aprender pero no le agarran, como aquel chavo que está ahí -señala a un joven repartidor-, en realidad muchos son los que han querido y no han podido”, refiere el hombre de 44 años originario de Naranjos, ciudad del Norte de Veracruz.
Aún ostentando una playera de algodón de las pasadas elecciones locales en Ciudad Madero, cuenta que “se les hace pesado y caliente ser panadero… la verdad sí, por eso es que solamente inician pero no continúan”.
De forma generalizada parece que todos los sectores productivos tienen problemas para mantener sus ventas; sin embargo, Ángel asegura que no ha visto una disminución en el trabajo, en la producción, ya que “la gente siempre quiere comer pan”.
“Haga calor o frío, en las mañanas o por las tardes, la gente siempre quiere estar comiendo pan, así que difícilmente se tienen problemas con eso”, explicó quien labora en la panadería “Los Ángeles”, que se ubica a unos pasos de la avenida Monterrey, en el centro de Tampico.
A pesar de que entre los jóvenes existen casos de renuncia por llevar a cabo una labor tan tradicional en la cultura mexicana, el panadero tampiqueño por adopción no considera que sea un oficio que esté en riesgo, ya que aún alcanza para mantener a la familia.
“La gente nunca va a dejar de comer pan, que porque hace calor, nombre, como quiera vienen a comprarlo”, refiere el hombre que aún disfruta hacer feliz a la gente a través de las conchas hasta un budín.
Explica el señor Mar que una de las satisfacciones que le genera hacer dicha labor es ver que la gente pueda disfrutar de dicho alimento en familia, durante las tardes o por las mañanas, siempre acompañado por una taza de café.
Recuerda que llegar a ser un panadero consolidado, lo cual lo demuestra su trabajo diario, le ha costado mucho empeño y esfuerzo, ya que hace casi una década llegó a una panadería de la Isleta Pérez, en donde aprendió y perfeccionó que hasta hoy día hace. “Como hace más de siete años llegué como cualquier chambeador, primero trabajé limpiando latas y todo eso, así, viendo, fue como aprendí todo esto que es un oficio muy bonito”, recuerda con una sonrisa el panadero.
Al realizar un recorrido por el centro de Tampico, por las principales calles, se puede constatar que la venta de pan ha crecido, ya que a la par de los negocios establecidos y tradicionales, han surgido panaderos ambulantes.
Empresarios del ramo en el sur de Tamaulipas indican que en temporada de invierno repuntan un poco las ventas, del 20 al 50 por ciento, debido a las bajas temperaturas.