Ese segundo en que quieres que a Trump le vaya bien…
Si algo hemos aprendido en nuestros meses con Trump es que el presidente de Estados Unidos es un genio para distraer, distorsionar, ganar la agenda mediática.
Lo que hemos visto el último mes es a la prensa estadunidense tratando, con reporteo y periodismo, de imponerse, gracias al tema de Rusia y a Trump insistiendo en otros asuntos. Es, en muchos sentidos, un gran duelo de aquella democracia.
Y también, si algo hemos aprendido de Trump es que le encanta refugiarse en temas que entusiasman a su base y no causan tanta resistencia entre los que no votaron por él.
Por todo esto, habrá que estar atentos en las próximas semanas. En la medida en que el asunto ruso se le ponga peor, y después de su derrota al intentar terminar y reemplazar el sistema de salud impulsado por Obama, no será raro que regrese a los temas sensibles a México: migración y comercio.
Ayer mismo, el vocero de la Casa Blanca placeó en algunos medios y después tuiteó las entrevistas con Thomas Homan, director interino de ICE, quien anunció que “planea desplegar a cientos de agentes en ciudades santuario para arrestar a criminales ilegales”.
Y agregó que desde que Trump entró en el cargo, “los cruces fronterizos ilegales se redujeron casi un 70 por ciento —‘un mínimo histórico’, según él—; las detenciones en el país han aumentado un 40 por ciento y ahora la cantidad de criminales ilegales en las cárceles locales se ha disparado un 80 por ciento”.
Ayer, la oficina de representación comercial de Estados Unidos entregó al Congreso el documento de sus prioridades para la próxima renegociación del TLC. El documento, como lo señaló ayer Ildefonso Guajardo en entrevista con Carlos Loret, repite, ahora con más particulares, la visión que había planteado Trump desde campaña. Su objetivo, por ejemplo, es reducir su déficit comercial, quiere acabar con el mecanismo de solución de controversias, y mantener el derecho a limitar temporalmente exportaciones como se le dé la gana.
La verdad es que ambos temas, migración y TLC, tienen una base más grande que los votantes trumpianos. Y por eso, en la medida que el resto de su agenda siga paralizada y la investigación rusa se agrave, regresará con más dureza en estos temas.
A veces uno quisiera que le fuera bien con lo otro para que se olvidara de México… ok, no.