Transportistas: el TLC es historia incumplida
Exigirán lo pactado: indemnización por daño causado, reciprocidad en los servicios para empresas mexicanas en EU y armonía en las regulaciones
Ya suman 23 años en los que Estados Unidos ha impedido transitar en su territorio al autotransporte de carga mexicano, y ahora la renegociación del Tratado de Libre Comercio (TLC) abre la oportunidad de contar con mecanismos eficientes y rápidos para resolver las controversias, señalaron representantes del sector y expertos.
El 27.7 por ciento del producto interno bruto mundial se genera en la región del TLC y 16.42 por ciento del comercio internacional está en Norteamérica, según datos de la industria. “El TLC es la historia de un tratado incumplido por el gobierno de EU”, acotó el vicepresidente de la Cámara Mexicana del Autotransporte de Carga (Canacar), Refugio Muñoz.
Y aunque los camiones mexicanos carecen de permiso para circular en EU, a pesar de lo establecido en el TLC, su participación en el movimiento de mercancías tanto de importación como de exportación es de 86.44 por ciento, dijo el líder del gremio, pues cada año se realizan 11 millones de cruces de carga entre ambos países en la zona comercial fronteriza permitida.
Aun cuando en el tratado se estableció la apertura en autotransporte entre los tres países y solo se reservó el cabotaje —los servicios domésticos—, desafortunadamente no se ha cumplido.
Muñoz sostuvo que en la revisión del tratado comercial se exigirá cumplir con los términos pactados: indemnización por el daño causado, reciprocidad en los servicios de transporte terrestre de mensajería y paquetería para empresas mexicanas en EU y la armonización de las regulaciones estatales y federal de ese país.
Panel de controversias
Para Eugenio Salinas, uno de los dos coordinadores del cuarto de junto del Consejo Consultivo Estratégico para Negociaciones Internacionales de México, una oportunidad para atender las peticiones de los transportistas de carga mexicanos, ante el incumplimiento estadunidense es mejorar los mecanismos de controversias.
Cuando los mecanismos de solución de controversias operen se abrirán oportunidades, por ejemplo, en la “formación de paneles arbitrales”, comentó en entrevista Eugenio Salinas, negociador del nuevo TLC.
Refirió que en ocasiones los paneles de controversia no operan en el tiempo y la agilidad requeridos, por lo que urge ser modernizados, a fin de cumplirlos.
Explicó que en la agenda de modernización del TLC la industria de transporte ha protagonizado uno de los puntos contenciosos más relevantes en la historia del acuerdo comercial, justo por el incumplimiento en el que se incurrió, el que se tuvo que compensar mediante aranceles a productos estadunidenses.
Lo que viene, agregó Salinas, es modernizar el convenio bajo los parámetros del Acuerdo de Facilitación Comercial que promovió la Organización Mundial del Comercio y que incluye conceptos como la logística, el cual no fue incorporado en 1994, año en que entró en vigencia el TLC.
¿Una utopía?
Para Alex Theissen el transporte transfronterizo no funcionó por la falta de interés de los empresarios de ambos países por participar. “Tenemos que ser justos y recíprocos, no funcionó porque está basado en una utopía”. Un transportista de Nueva York es falso que tenga interés en traer carga, por ejemplo a San Luis Potosí y regresar cargado, dijo.
Faltan conductores que lo quieran hacer y, además, lo que sí se puede mover con facilidad es la carga y el remolque; por ello, Theissen dijo que la oportunidad en la modernización del TLC el objetivo debe ser en ese sentido. “No necesitamos que el operador de Estados Unidos llegue a San Luis o a Yucatán, sino que llegue bien la carga”.