Duarte, al banquillo; hoy definen su futuro
Juez decide si lo vincula a proceso por lavado y crimen organizado
El festejo por el cumpleaños 84 de Porfirio Muñoz Ledo reunió a rebeldes de izquierda y de derecha. Fundadores, miembros y simpatizantes del PRD, así como la priista Ivonne Ortega, celebraron al impulsor de la Constitución de la Ciudad de México.
La comida, organizada por el senador Alejandro Encinas y otros compañeros, fue en un restaurante de un hotel del Centro Histórico. Parecía una reunión de izquierdas, pues desde las 14:30 desfilaron la fundadora perredista Ifigenia Martínez, la senadora Dolores Padierna; la secretaria de Gobierno, Patricia Mercado, y el ex rector de la UNAM Juan Ramón de la Fuente.
El festejado recibió abrazos, besos, botellas de vino y corbatas; incluso Cuauhtémoc Cárdenas le entregó un obsequio de la marca Chanel.
La celebración inició con un discurso de Encinas, quien se retrasó porque “el tráfico estaba muy pesado debido a las obras que hay en la ciudad”. “Porfirio ha sabido ser eslabón de muchas generaciones, pero no vine a echar un rollo, vine a echarme unos tragos con ustedes”, bromeó.
En seguida, el fundador perredista sacó un par de hojas escritas a mano y leyó su discurso, en el que se definió como un luchador y no como un diplomático o político.
Cobijado por miembros del gabinete capitalino, Muñoz Ledo mencionó que hoy el gran problema es la acumulación del poder y cómo se ejerce y distribuye.
“Entre la historia y el poder hay mucha distancia; hay quienes ejercen el poder y son denostados por la historia y hay quienes pasan a la historia sin haber llegado al poder”, dijo.
Después del brindis comieron queso tapado, crema tarasca, pierna de cerdo en manchamanteles, nieves mexicanas y café. Muñoz Ledo apagó la vela de un pastel individual de chocolate.
La primera en irse fue Ortega, quien aclaró que no tiene intenciones de cambiar de partido y que asistió como amiga de Muñoz Ledo, pues ha coincidido con él en el Poder Legislativo.
Hoy se define la situación jurídica del ex gobernador de Veracruz Javier Duarte, acusado de operaciones con recursos de procedencia ilícita y delincuencia organizada. El juez de Control Gerardo Moreno García determinará si existen indicios suficientes para llevarlo a juicio o dejarlo en libertad.
A las 10 de la mañana inicia la audiencia de vinculación en los juzgados federales del Reclusorio Norte, donde permanece Duarte desde el lunes pasado, cuando llegó a México tras su extradición de Guatemala.
De acuerdo con el nuevo sistema de justicia penal acusatorio, en esta audiencia presentarán pruebas tanto por la Procuraduría General de la República (PGR) como la defensa del ex priista, encabezada por el abogado Marco Antonio del Toro.
En el caso de la PGR, participarán los mismos agentes del Ministerio Público de la Federación que se presentaron en la primera audiencia y que fueron criticados por su actuación, Martha Ramos Castillo, Nelly Magaly Alvarado y Pedro Guevara Pérez, pues así es por ley.
No exhibirán todas las pruebas con que cuenta la PGR, solo las que consideren suficientes para convencer al juez de control de vincular a proceso de Duarte.
Aunque la audiencia es este sábado, el plazo constitucional de 144 horas para decidir la situación jurídica del ex mandatario vence el domingo; sin embargo, el juez decidió que se desarrollará hoy a fin de tener tiempo suficiente para tomar su determinación.
En caso de que el juez decida que existen indicios suficientes para que Duarte enfrente juicio, también tendrá que determinar si es internado en un penal federal o si permanece en el Reclusorio Norte durante el proceso.
En la audiencia inicial los agentes del Ministerio Público de la Federación solicitaron que el ex mandatario estatal fuera internado en el Centro de Rehabilitación Psicosocial ubicado en el municipio de Ayala, Morelos.
De igual forma, pidieron al juez de control que el ex priista no esté físicamente en la audiencia y su presencia sea por videoconferencia.
Otro escenario es que el juez Moreno García considere que no son suficientes los indicios para llevar a juicio al ex gobernador y dejarlo en libertad por los delitos federales, porque aún faltarían los ilícitos de abuso de autoridad, incumplimiento de un deber legal, peculado, tráfico de influencia y coalición, que le imputa la Fiscalía de Veracruz.
En caso de que ocurra esta situación, la PGR puede reformular la imputación contra Duarte, incluso por los mismo delitos.
En el caso de la defensa, Del Toro solicitó que en la audiencia esté presente el abogado fiscalista Alfonso Ortega López, quien durante seis años fue cómplice del ex gobernador. El secretario de Salud, José Narro, dijo que están dispuestos a presentar ante la PGR información adicional contra la administración de Duarte, debido a las irregularidades detectadas que derivaron en 23 denuncias penales.
En entrevista en Querétaro precisó que no es una denuncia específica contra el ex gobernador, sino contra quien resulte responsable. “Nosotros presentamos 23 denuncias penales contra quien resulte responsable; no le toca a la Secretaría de Salud hacer las investigaciones, pero sí denunciar los hechos, sí aportar la documentaron correspondiente para que el MP pueda hacer las indagatorias”, explicó.