No es lo mismo reír de él, que con Spicer
Me pareció muy divertida la aparición de Sean Spicer, ex vocero de Donald Trump, en los premios Emmy, pero fue aún más interesante la reacción de tantas persona en Hollywood que se molestaron porque se le dio una plataforma para aparecer como una personas con sentido del humor y hasta humana, cosa que muchos están seguros que es completamente incapaz de ser.
Pero el que se lleva se aguanta y, si gozamos tanto con la imitación que la actriz Melissa Mcarthy hizo de semejante personaje, tenemos que ser capaces de entender el otro lado de la moneda. Y ese otro lado es que este absurdo señor ya no tiene nada que perder. Así que burlarse de su ex patrón al hablar del tamaño de la audiencia del Emmy (comparándolo con la gente imaginaria que Trump vio en su inauguración) es lo menos que puede hacer para tratar de cambiar la idea que tiene la gente respecto a su persona, pero no lo logrará.
Claro, habrá quien diga que es una maravilla que tenga sentido del humor respecto al ridículo que hizo en los últimos meses, pero muchos otros nunca lo perdonarán por lo que perciben como su complicidad por hacerle daño al país. De ahí las caras de “¡¡¡no mam ….!!!” cuando apareció en la cancha de los liberales (porque no nos engañemos, los Emmy, el Oscar y Hollywood, en su gran mayoría, son precisamente eso).
Pero su verdadero problema será con la gente que antes estaba de su lado. Esos no perdonan, esos atacan. Esos destruyen. Y esos, esos siguen en el poder.
Así que este fue una gran ejercicio para preguntarnos: ¿De verdad el sentido del humor es el antídoto de la mayoría de nuestros males?. Quizás, pero lo cierto es que no conozco ningún liberal (me incluyo) que quisiera tomar un café con este señor. Ahora, tampoco un conservador, pero no niego que la carcajada sí me la sacó.
Pero funcionó
Digamos lo que digamos, en términos políticos hay que comentar esto.
En la mayoría de los análisis de redes y web que se dieron a conocer después de los premios Emmy, el nombre de Sean Spicer estaba entre los primeros dos más buscados.
El primero, en la mayoría de los casos, fue el del conductor del evento Stephen Colbert quien, sin duda, se llevó la noche.
Aunque admito que mi momento favorito fue cuando aparecieron Dolly Parton, Lily Tomlin y Jane Fonda contando cómo en los 80 ellas no permitieron que un misógino, sexista, egoísta, mentiros e hipócrita las controlara (refiriéndose a su gran película 9 to 5) y que en 2017 mucho menos lo iban a permitir. ¿No han visto la película? ¡Busquenla! Es un clásico.