Jefe de Uber estudia ir a Londres a conciliar
Dana Khosrowshahi buscará reunirse con el regulador y abordar la prohibición de operar en su mayor mercado europeo
Dara Khosrowshahi, el nuevo director ejecutivo de Uber, considera viajar a Londres para reunirse con los reguladores que prohibieron la aplicación para solicitar transporte en su mercado más importante de Europa.
Khosrowshahi, quien solo tiene tres semanas en el cargo, tuvo que asumir rápidamente el papel de un jefe diplomático en Uber, en un intento por presentar un tono más humilde y conciliador que su predecesor, el belicoso Travis Kalanick, y también tratar de apagar las conflagraciones regulatorias que amenazan el negocio global de Uber.
La forma cómo maneje la situación en Londres y si decide involucrarse personalmente al reunirse con los reguladores será la primera gran prueba política de Khosrowshahi. También puede ser crucial para determinar la dirección de un complejo acuerdo de inversión de 10 mil millones de dólares (mdd) que Uber negocia con SoftBank Vision Fund.
La semana pasada, Transport for London (TfL), el organismo regulador que preside el alcalde Sadiq Khan, dijo que planea revocar la licencia de Uber en Londres debido a que considera a la empresa no apta, aunque Uber puede seguir operando durante el proceso de apelación.
Khan invitó al nuevo jefe de Uber a reunirse con Transport for London. “A pesar de que hay un proceso legal en marcha, solicité a TfL que estuviera disponible para tener una reunión con él”, dijo Khan. A Uber no le queda otra opción más que ser amable en un mercado que se encuentra entre sus tres primeras ciudades globales por facturación, así como uno de los que tiene una mayor regulación. “Creo que Dara no puede dejar de ir”, dijo Mark MacGann, quien anteriormente dirigió el equipo de políticas europeas de Uber, refiriéndose al viaje a Londres. “Querrá ir para mostrar su estilo de liderazgo... enviar a alguien más se consideraría como el “viejo Uber arrogante’”.
Una ventaja de presentarse en persona es que Khosrowshahi puede aprovechar la ocasión para hacer valer su estilo personal de diplomacia. Sin embargo, el nuevo director ejecutivo también tiene muchas cosas en su plato; entre estos asuntos pendientes está la contratación de un nuevo director financiero y un abogado general, manejar la demanda de Waymo sobre el presunto robo de secretos comerciales y negociar un complejo acuerdo de inversión con valor de más de 10 mil mdd con SoftBank y otros inversionistas, incluido Didi, de China.
Durante años, Uber siguió el modelo de crecimiento a cualquier costo que defendía Kalanick, un enfoque con el que a menudo desacató las regulaciones locales de taxis y le ganó a la compañía la reputación de operar fuera de la ley.
Para Uber ha sido difícil sacudirse esa notoriedad, incluso cuando Khosrowshahi trata de pasar la página al mostrarse sincero y hablar sobre los problemas de la compañía. “La verdad es que hay un gran costo por una mala reputación”, escribió en un memorando interno para el personal después de la decisión de TfL. “En el futuro es vital que actuemos con integridad en todo lo que hacemos”.
Su tono fue de más arrepentimiento en una carta abierta publicada el lunes. “A nombre de todos en Uber a escala mundial, me disculpo por los errores que cometimos”, escribió.
No todo el mundo se tranquilizó con el nuevo mensaje de Uber, y los críticos de la compañía sostienen que una de sus principales ventajas empresariales ha sido su disposición a explotar los vacíos legales de las regulaciones. “Tienen muchos temas que resolver, y cuando piden perdón, me parece algo prematuro hasta que resuelvan de todas las cosas que tienen que resolver”, dijo Benjamin Edelman, profesor de la Escuela de Negocios de Harvard. Entre las áreas que la compañía tiene que abordar para hacer cambios, sugiere que el grupo puede reembolsar cargos erróneos a pasajeros.
Pero el cambio en el mando de Uber también le presenta a los reguladores una oportunidad para presionar por nuevas concesiones. “Uber hará cualquier cosa para mantener la imagen de relaciones públicas, no quiere ningún tipo de imagen negativa”, dice Santosh Rao, analista de Manhattan Venture Partners. “Así que ahora darán más. Este es el momento adecuado para exigir concesiones de Uber, porque necesitan hacer lo necesario, no pueden perder Uber UK”.
Incluso si Uber recupera su licencia del TfL —se espera que el proceso de apelación sobre la decisión dure varios meses y Uber podrá seguir operando en ese tiempo— la firma enfrentará grandes obstáculos en el mercado de Reino Unido.
Uno de los principales blancos para los críticos de Uber es la estructura fiscal que utiliza y que canaliza todos los pagos de los pasajeros a través de una filial holandesa para evitar registrar esos ingresos en Reino Unido.
La compañía también se enfrenta a la incertidumbre sobre si los tribunales le van a dar a sus conductores la categoría de empleados que deben tener prestaciones, o de contratistas independientes, que es lo que prefiere Uber.
Esos riesgos, junto con la amenaza de que TfL le prohíba operar, significa que Uber se enfrenta a una lucha difícil antes de poder tener una presencia regulatoria firme en Reino Unido, sin importar lo diplomático que pueda ser Khosrowshahi.
“La verdad, hay un gran costo por una mala reputación”, escribió el CEO en un memorando Uno de los blancos para los críticos de la empresa es la estructura fiscal que utiliza