Milenio Tamaulipas

Las Higueras, entre el olvido y la destrucció­n

Por años, los habitantes cercanos a la zona arqueológi­ca se han asentado sobre la mayoría de sus estructura­s piramidale­s, en muchos casos diseminánd­olas y devastándo­las: experto

- Leticia Sánchez Medel/Las Higueras, Veracruz JORGE CARBALLO

Por sus trazos, sus colores, su perspectiv­a y la manera en que los Totonacas del Golfo de Veracruz representa­ron con pintura mural parte de su vida cotidiana, el centro ceremonial de la Zona Arqueológi­ca de Las Higueras es identifica­do como el “Bonampak veracruzan­o”. Su riqueza es impresiona­nte porque parece contener una enorme gama de estilos y escuelas artísticas.

Este sitio, descubiert­o apenas hace unas seis décadas, cuando la población se asentó prácticame­nte sobre los vestigios piramidale­s de las antiguas poblacione­s del Totonacapa­n que habitaron dicha región antes de la llegada de los españoles, necesita ser restaurado con urgencia.

A Las Higueras, donde se erige el único monumento prehispáni­co preservado por el Instituto Nacional de Antropolog­ía e Historia (INAH), de los 28 basamentos registrado­s, se puede llegar por la carretera nacional costera número 180 que va del Puerto de Veracruz hacia Nautla.

Actualment­e, la población está asentada sobre la mayoría de las estructura­s piramidale­s de Las Higueras, algunas de ellas diseminada­s y devastadas, luego de que sus habitantes las utilizaran para construir sus viviendas, afirma el arqueólogo Jaime Cortés Hernández, investigad­or del INAH y conocedor de la región de la costa del Golfo.

Este centro ceremonial se ha ido perdiendo paulatinam­ente, desde el momento en que las personas llegaron aquí expulsadas por el crecimient­o urbano de algunos centros de población.

A pesar de los esfuerzos de don José, quien custodia este centro ceremonial prehispáni­co como si fuera su propia casa, desde su descubrimi­ento en la década de los 60 del siglo XX, la pirámide de la Zona Arqueológi­ca de La Higueras requiere de una urgente intervenci­ón para frenar su inminente deterioro.

“Voy a cumplir 50 años de estar aquí, entré a trabajar el 8 de noviembre de 1968. Cuando descubrier­on esta pirámide yo era velador, pero de día venía a presenciar los trabajos de exploració­n, me tocó ver cómo el restaurado­r desprendía los murales que habían encontrado. No sé qué fue del restaurado­r, pero los arqueólogo­s que vinieron de Xalapa, casi todos, ya me dejaron”.

La pequeña zona arqueológi­ca, que solo consta de un basamento piramidal y un pequeño museo, es preservada por don José, quien orgulloso de su labor reconoce que viene muy poca gente, porque no es un sitio turístico, y la que acude, a veces no puede pagar la entrada, que es de 39 pesos.

La zona de Las Higueras se desarrolló del 600 al 1250 de nuestra era, y fue justamente en este lugar que se localizaro­n vestigios de pinturas murales que apareciero­n sobre varias capas de estucado cubiertas con pinturas al fresco, explica el arqueólogo Cortés Hernández. “Los vestigios de las pinturas murales representa­n actividade­s cotidianas, así como algunas festividad­es. Se pueden ver a grupos de personas con sus respectiva­s vestimenta­s y peñachos, algunos marchando, otros caminando en los ríos, y unos cuantos tocando instrument­os musicales, se podría decir que las representa­ciones son similares a la de la pintura maya”.

Dada la trascenden­cia, los fragmentos murales fueron trasladado­s para su cuidado y preservaci­ón al Museo de Antropolog­ía de Xalapa.

Riqueza en vestigios

Apenas a unos metros de la Zona Arqueológi­ca de Las Higueras, fueron edificadas algunas casas sobre los basamentos prehispáni­cos, otras viviendas más al interior del poblado cuentan en sus patios traseros con sus “propias pirámides”.

La señora Edelmira Limón García, quien es profesora jubilada, dice que la zona arqueológi­ca es muy importante, “pero el estado no le ha dado la importanci­a que tiene”.

Ella, como la mayoría de los habitantes de esta comunidad, tiene un basamento piramidal en la parte trasera de su terreno, el cual está ubicado a unos metros del Río Colipa: “Para mí es una tristeza que las aguas residuales del drenaje de este pueblo se vayan hacia el río, por lo que está ya muy contaminad­o, ya casi no hay pescado, ni ostión”.

Es mínimo lo que se conserva de la monumental­idad que alguna vez tuvo la zona arqueológi­ca de Las Higueras: la única pirámide descubiert­a se ha ido deterioran­do, por lo que a decir de los especialis­tas del INAH no es factible su conservaci­ón futura. Frente a eso, habrá que buscar una opción para su conservaci­ón y esto plantea una disyuntuva: ya sea que se explore para su consolidac­ión o que vuelva a cubrirse totalmente.

 ??  ?? El conjunto prehispáni­co debe ser explorado para su consolidac­ión o volverse a cubrirse totalmente.
El conjunto prehispáni­co debe ser explorado para su consolidac­ión o volverse a cubrirse totalmente.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico