Evalúan eliminar permisos para fiestas en las calles

Sabino Saldierna Trejo, mejor conocido como “don Pajarito”, es un hombre de 80 años de edad y se ha dedicado a la elaboración de piñatas. “Me niego a dejar morir esta hermosa tradición”.

En el año de 1970, don Sabino, procedente de Río Verde, San Luis Potosí, llegó al puerto de Tampico junto a su esposa doña María en busca de oportunidades y una mejor calidad de vida.

“Yo inicié con la elaboración de piñatas aquí en la colonia Morelos; fui pionero, solo éramos dos piñateros en la zona. ¡Vendíamos bastante! Diario hacíamos hasta 200 piñatas, yo tenía que contratar a otras personas para que me ayudaran porque me hacían grandes pedidos para llevárselas a México. Se vendían mucho, en aquel entonces las dábamos en 5 pesos”.

Hoy en día ha disminuido hasta un 60% la venta en los últimos siete años, según su opinión.

A casi 50 años que inició con este oficio como una manera de tener un ingreso mientras encontraba una mejor oportunidad de vida, nunca imaginó que las piñatas serían el sustento de toda su familia.

Llegó un momento en que “don Pajarito” ya no tuvo que contratar personal debido a que poco a poco los nuevos integrantes se fueron uniendo a este noble oficio; sus nueve hijos, de los cuales viven seis, también nueras y sus 11 nietos, con gran cariño y pasión se reúnen diariamente durante esta temporada para seguir elaborando las coloridas piñatas, las cuales son puestas a la venta en la avenida principal de la colonia Morelos, a las afueras de su domicilio, para que la gente pueda ver los diseños.

Don Sabino platica que con el paso del tiempo la compra de piñatas ha disminuido mucho, debido a que poco a poco va desapareciendo esta divertida tradición, aunado al elevado costo de los cacahuates, nueces, dulces y colaciones con los que tradicionalmente se rellenaban las piñatas.

“Nosotros las damos a 80 y 100 pesos, muy baratas por la competencia y que la gente ya no las compra como antes”.

A su edad todavía se llena las manos de engrudo y les da forma a estos productos mexicanos.

“Mientras Dios me dé licencia, seguiré ‘volando’, para mantener viva la tradición de las piñatas”, comentó con una gran sonrisa “don Pajarito”.m

La Secretaría del Ayuntamiento está analizando no dar más permisos para cerrar calles y realizar festejos, la situación se va a consultar con Protección Civil y con Tránsito, corporación que pidió se tenga mayor control en estas autorizaciones.

Israel Hernández Villanueva, secretario del Ayuntamiento de Altamira, precisó que harán un análisis sobre el reglamento, para ver si es factible negar los permisos para cerrar calles, o endurecer más las normas, tras el accidente del fin de semana que dejó dos personas muertas y ocho más heridas.

Indicó que son Tránsito y Protección Civil los que marcan las pautas para que se den los permisos, es decir, ellos analizan la situación de

Fue pionero en la colonia Morelos, eran solo dos y vendían hasta 200 piezas

cada calle que se pretende cerrar, además de que se toma en cuenta la opinión de los vecinos.

Hasta el momento ninguna autoridad municipal ha verificado su la quinceañera que se realizó el sábado en Villa Cuauhtémoc tenía permiso para cerrar la calle, donde inclusive se instaló el grupo municipal.

“Como recordaba Tránsito y PC tienen la pauta si son factible o no, hay que analizar al respecto cada una de ellas, como te comento son en su momento los vecinos del lugar que estén de acuerdo, si se podría analizar al respecto”.

Cabe señalar que el pasado fin de semana un conductor ebrio, arrolló con su camioneta a 14 personas que bailaban en una calle que fue cerrada, para realizar una quinceañera.

Con el paso del tiempo la venta ha disminuido mucho; la gente ya no las compra como antes