Es exhibido un bajorrelieve olmeca de casi 3 mil años
Según establece un reporte del INAH, entre 2016 y 2017 se han logrado recuperar casi 16 mil piezas arqueológicas del tráfico ilícito
El monumental bajorrelieve de Xoc, de origen olmeca, de dos metros de altura y de más de 3 mil años de antigüedad, se exhibe en el Museo Nacional de Antropología (MNA), como uno de los ejemplos representativos de la forma en que México trabaja en la repatriación de bienes tras el saqueo arqueológico que ha afectado a nuestro país.
El INAH reporta que en 2016 recuperó 6 mil 818 piezas, mientras que en 2017 fueron 9 mil 191 piezas y 68 bolsas con fragmentos.
En este contexto el instituto presentó públicamente el bien cultural repatriado hace dos años: una extraordinaria obra tallada en piedra, que fue literalmente arrancada de la roca original entre 1969 y 1970 del sitio arqueológico de Ocosingo, Chiapas, y vendida ilegalmente en Francia.
El bajorrelieve, fragmentado en cinco partes con cinceles y marros, fue recuperado en París, Francia, con el apoyo de la Organización Internacional de Policía Criminal (Interpol), convirtiéndose así en la primera pieza repatriada de esa nación sin mediación judicial, gracias a la Asociación de Amigos de México en Francia.
Durante la presentación de este vestigio prehispánico que muestra claramente los daños ocasionados por los saqueadores al momento por desprenderla de la roca madre, María del Socorro Villarreal, coordinadora nacional de Asuntos Jurídicos del INAH, dijo que el bajorrelieve se pudo identificar ya que fue registrado fotográficamente por Wolfgang Cordan en 1959, y 14 años después por la arqueóloga Susanna Ekholm, quien hizo un primer estudio de la pieza; sin embargo, cuando regresó a la Selva Lacandona para continuar con su investigación, se percató de que había sido saqueada, probablemente entre 1968 y 1972.
La pieza se encontraba en París en 2014, en manos de un coleccionista particular, quien la tenía empotrada en un muro. Cuando falleció, sus hijos decidieron venderla a una casa de subastas, la cual se percató de que era una pieza robada y que difícilmente la iban a poder vender, por lo que contactó a la Asociación de Amigos de México en Francia.
Subrayó que la repatriación de ese bien cultural fue posible debido al trabajo coordinado y sistemático con las autoridades de cancillería. En este caso, precisó, “no intervino ninguna autoridad judicial en Francia”.
La funcionaria aseguró que México continuará en su lucha por la repatriación del patrimonio arqueológico e histórico.
Antonio Saborit, director del MNA, dijo que la pieza no está restaurada aun cuando los expertos “son capaces de disimular casi perfectamente estos criminales cortes que le hicieron, y los museógrafos tiene toda la capacidad también para disimular el daño causado por el expolio a la parte posterior, donde, deliberadamente, están en su lugar los tornillo que sostenían la pieza suponemos que en el lugar donde el coleccionista la conservaba”.
La restauradora Rebeca González detalló que la obra escultórica presenta una figura humana con un turbante, ataviada con una suntuosa indumentaria, en ella se observa su brazo izquierdo doblado sobre su pecho sosteniendo un objeto muy elaborado.
Esta pieza recibirá en el vestíbulo a los visitantes del MNA, explicó Saborit, quien agregó que tras los trabajos de consolidación se decidirá su ubicación en la Sala Del Golfo del recinto de Chapultepec.
La obra fue recuperada por la Interpol en 2014 y repatriada sin mediación judicial
Villarreal abordó el caso contra el costarricense Leonardo Augustus Patterson, de reclamo de las piezas de su colección que tienen un origen ilícito: al menos 690 de ellas fueron sustraídas ilegalmente de México. “Tenemos 10 años dando seguimiento a este asunto, desde el momento que la Interpol nos informó que la colección se encontraba en Santiago de Compostela”.
Por lo menos, indicó, se recuperaron dos piezas olmecas de madera, procedentes del sitio El Manatí, las cuales serán repatriadas en los primeros meses de 2018.