Republicano provoca impasse en Congreso
El senador conservador Rand Paul bloquea la votación sobre presupuesto federal, por lo que el gobierno entró técnicamente en cierre parcial
El gobierno de Estados Unidos incurrió a medianoche en su segundo cierre parcial administrativo en menos de tres semanas, después de que el senador republicano Rand Paul bloqueara la votación de un acuerdo presupuestario para los próximos dos años.
Estaba previsto que las dos cámaras legislativas sometieran a votación la propuesta presupuestaria en la madrugada, una vez que lograran superar el bloqueo al que las sometió Paul, lo que permitirá una rápida reapertura del gobierno encabezado por el republicano Donald Trump. “Me lancé como candidato porque era muy crítico de los multimillonarios déficits del ex presidente Barack Obama”, indicó el senador conservador. “Ahora tenemos a los republicanos y a los demócratas ofreciéndonos déficits de billones de dólares. Honestamente no puedo mirar hacia otro lado”.
Ya desde la tarde de ayer, el gobierno federal había tomado medidas para enfrentar la parálisis ante la falta de acuerdo legislativo.
Sin aprobación de la medida se producirá el shutdown (como se conoce en inglés al cierre) del gobierno, que ya no tendrá fondos y deberá licenciar a cientos de miles de funcionarios, como pasó durante tres días del 20 al 23 de enero, empañando el primer aniversario de la toma de posesión de Trump.
A través de su Oficina de Gestión del Presupuesto (OMB, en inglés), la Casa Blanca pidió a las agencias que alisten los planes de contingencia ante la falta de fondos y que informen a sus empleados del impacto que tendrá un eventual cierre. “Se está instando ahora a las agencias a que revisen y se preparen para el lapso” sin fondos, dijo al periódico The Washington Post el portavoz de la OMB, John Czwartacki.
El líder de la mayoría republicana en el Senado, Mitch McConnell, y su contraparte demócrata, Chuck Schumer, habían alcanzado en principio este miércoles un gran acuerdo para dotar de fondos al gobierno de Trump durante los próximos dos años que, además, debía evitar un nuevo cierre.
Las agencias federales presentaron planes de contingencia. La parálisis parcial obliga en esencia a la mitad de la fuerza de trabajo federal a quedarse en su casa, congela algunas operaciones y cierra a algunos parques nacionales y otras instalaciones. Los servicios considerados esenciales continuarán trabajando, incluidos los pagos de seguro social, el sistema de control de tráfico aéreo y las fuerzas policiales.
Los republicanos de corte conservador creen que la iniciativa aumenta significativamente la deuda pública, cuando la reforma impositiva aprobada en diciembre ha generado una masiva caída en la recaudación de impuestos.
Por su parte, la oposición demócrata se queja porque el acuerdo no contempla la regularización de cientos de miles de dreamers (“soñadores”), como se conoce a los jóvenes llegados ilegalmente al país —la mayoría desde México— de niños y beneficiarios del programa Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA, por sus siglas en inglés).
Unos 690 mil dreamers acogidos a este programa estaban protegidos de la deportación en septiembre, cuando Trump derogó el programa creado por Obama. El mandatario le dio al Congreso hasta el 5 de marzo para legislar.