Sigiloso, Flint escaló hasta la cima de HSBC
Aunque los ingresos de 2017 revirtieron 6 años de caídas, entre sus prioridades está enfrentar los malos resultados en Estados Unidos y Francia
Reflexivo, estudioso y humilde, son palabras que utilizaron inversionistas y colegas para describir a John Flint, el nuevo director ejecutivo de HSBC, quien esta semana asumió el cargo del banco más grande de Europa por activos.
Sin embargo, las personas que conocen bien a Flint dicen que detrás de la imagen de perfil bajo y estudioso del ejecutivo de 49 años se encuentra una vena de implacable que lo ayudó a ascender silenciosamente a uno de los puestos más poderosos en el sector bancario.
Entusiasta de los deportes, Flint terminó varios triatlones y competencias de iron man. Aún disfruta correr y nadar en mar abierto, aunque declara que las presiones del trabajo casi no le dejan tiempo libre.
Tras reemplazar a Stuart Gulliver unas horas después de que HSBC publicó sus resultados anuales el martes, Flint necesitará toda su energía para mantenerse en la cima un banco que tiene 2.5 billones de dólares en activos en 67 países y al que se le critica por ser “demasiado grande para administrar”.
Incluso Gulliver, quien preparó a Flint para reemplazarlo, alguna vez comparó al grupo con el ejército, la iglesia o el servicio civil, al decir que para él era casi imposible conocer todo lo que hacía su personal en respuesta al escándalo de evasión fiscal en su banca privada suiza.
Los resultados de esta semana mostraron que los ingresos de 2017 revirtieron seis años de caídas para subir 5 por ciento y llegar a 51 mil 500 millones de dólares (mdd), mientras que las utilidades netas aumentaron más de siete veces para llegar a 9 mil 700 mdd. Pero las acciones cayeron en el día, ya que los inversionistas se quejaron de la falta de recompra de acciones.
Flint se negó a pronunciarse sobre su estrategia, y prometió actualizar a los inversionistas en los resultados intermedios a principios de agosto. “La estrategia actual a la que llegó Stuart está funcionando, como pueden ver a partir de los resultados de hoy”, dijo el martes.
Un área que probablemente cambie es la de gestión de activos, en la que HSBC desde hace mucho tiempo considera como una subescala y Flint dice que evalúa todas las opciones. Los banqueros de inversión dicen que HSBC quiere replicar el tipo de acuerdo que hizo Crédit Agricole y Société Générale de Francia para crear Amundi al fusionar sus unidades de gestión de activos.
Otras prioridades son abordar los malos resultados del banco en Estados Unidos y Francia. Flint busca ampliar su operación estadunidense, que el año pasado se volvió rentable, pero que todavía sufre con alrededor de 8 mil mdd de capital excedente que diluye los rendimientos.
Después de trabajar en HSBC toda su carrera de 28 años —compañía a la que se unió como parte de su programa de graduados de “gerencia internacional”— y más recientemente ser el director de la banca minorista y gestión patrimonial durante cinco años, Flint está bien equipado para manejar estos problemas.
Sin embargo, muchos analistas esperan que ceda gran parte de la toma decisiones estratégicas del banco a Mark Tucker, quien se convirtió en el primer presidente del banco que viene de una empresa externa cuando lo contrataron el año pasado de la aseguradora asiática AIA.
“John no tiene el carisma o la habilidad de liderazgo de Stuart”, dice un antiguo colega, y espera que actúe más como un director operativo que como un CEO.
Hugh Young de Standard Life Aberdeen, uno de los 10 principales inversores de HSBC, dice que la alianza Tucker-Flint “podría funcionar bien y hasta el momento me dicen que funciona entre los dos, pero requiere un ligero de ajuste por parte de Mark y que John asume un poco más la responsabilidad”.
A diferencia de muchos jefes superestrellas de bancos, Flint no es sociable ni es un graduado de una universidad de élite. Estudió economía en un politécnico del Reino Unido. Creció en Yorkshire antes de mudarse a los siete años a Arabia Saudita, donde su padre era profesor universitario.