Preocupa a la Iglesia las agresiones en plena misa
El Obispo de Ciudad Victoria, Antonio González señaló que estas acciones dejan ver una sociedad que está en descomposición
Asegura Obispo que los atentados que se están presentando contra la iglesia Católica son parte de la misma descomposición de la sociedad y del fanatismo de algunas personas y grupos, lo cual es preocupante, pues se están perdiendo valores como el respeto.
Este domingo en Matamoros arrojaron un artefacto explosivo en plena misa de la iglesia San Antonio de Padua, mientras que el jueves, el hecho se registró en la Catedral del mismo municipio, donde aventaron un artefacto similar; sin embargo no se reportaron personas lesionadas.
Al respecto, el Obispo de la Diócesis de Ciudad Victoria, Antonio González Sánchez dice “tristemente es el ambiente que estamos viviendo, una manifestación más del ambiente que estamos viviendo en la sociedad de violencia y de agresividad”.
Aunque el Obispo no descartó que otros grupos o sectas estén atentando contra la iglesia, dijo que algunas personas se fanatizan y agreden como lo que pasó hace unos meses en la Catedral de Tampico y en la Conferencia del Episcopado.
“Son cosas que tristemente se dan, no saben respetar a los demás, tenemos que aprender a respetarnos unos a otros, independientemente de cuál sea nuestro credo religioso.
Yo así lo veo, un signo más de lo mal que andamos como sociedad, la iglesia no es ajena a la sociedad, está integrada por la sociedad”.
Agregó que la situación de violencia y de inseguridad se ha incrementado, la situación cada vez es más complicada, pues ahora atentan también contra la Iglesia. Pese a essto, el prelado descartó pedir seguridad a las autoridades.
En el marco del Día de la Familia aseguró que la familia es uno de los valores que ha perdido más importancia en nuestros días, “la familia debe de ser una escuela de amor, aquí es donde deben aprender a amar más, algo que se ha perdido sobretodo en las familias jóvenes” .
En este sentido destacó que ya los jóvenes no se quieren casar, ya no hay responsabilidad, el valor que debería tener la familia, lo que aprendimos en la escuela que es la célula de la sociedad, está muy devaluado.
Desetacó que la promoción de los llamados matrimonios igualitarios han contribuido a ésta desvalorización, pues señaló que no son matrimonios, ya que este término corresponde a la unión de un hombre con una mujer, de lo contrario es antinatura, concluyó.