Catalán rechaza cargos de rebelión
El ex presidente regional catalán Carles Puigdemont, encarcelado en Alemania a la espera de resolverse un pedido de extradición de España, impugnó su procesamiento y aseguró que no se justifica la acusación de rebelión que pesa sobre él.
El recurso del abogado Jaume Alonso-Cuevillas, de 85 páginas, pide “decretar la nulidad de las actuaciones practicadas” por el Tribunal Supremo español, que está instruyendo la causa contra la cúpula separatista catalana en relación con su intento de secesión en 2017. En su escrito con fecha 28 de marzo y dirigido al alto tribunal, el letrado considera que el Supremo carece de “competencia objetiva”, y pide que la causa pase a manos del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña.
También pide vaciar de contenido la causa y excluir los delitos de rebelión, malversación o desobediencia contra Puigdemont y dos ex miembros de su gobierno cesado: Clara Ponsatí, en libertad condicional en Escocia, y Lluís Puig, instalado en Bruselas.
El recurso también rebate que hubiera malversación de fondos públicos en la organización de la consulta del 1 de octubre, cuyo costo fue cifrado en 1.6 millones de euros.
Puigdemont, detenido el 25 de marzo en el norte de Alemania en virtud de una euroorden de la justicia española, está preso en Neumünster, donde está pendiente de un proceso de extradición a España.
Junto a él, otros nueve destacados independentistas, entre ellos seis integrantes de su antiguo ejecutivo, están en prisión preventiva en España en el marco de la misma causa.