“Había Meade antes de Peña y lo habrá después”
Señala que representa un “cambio con punto de partida; soy un aspirante ciudadano que busca la transformación luego de 82 años”
El abanderado presidencial de la coalición Todos por México, José Antonio Meade, se desmarcó de la administración del presidente Enrique Peña Nieto al aclarar que “no es el candidato de la continuidad”, sino un “cambio con punto de partida”.
“Nadie es el candidato de la continuidad, tendría que estar loco para plantear...(interrumpe el moderador) soy un candidato ciudadano, de tres partidos. Una transformación como esa es muy difícil de conformar, en 82 años de historia nunca había habido un candidato ciudadano. De ese tamaño es la transformación”, dijo.
Insistió: “En el caso de la boleta, el que está en la campaña soy yo, algo es cierto, había Meade antes de Peña Nieto y habrá Meade después de Peña Nieto”.
Al reunirse con consejeros regionales de BBVA-Bancomer, advirtió que las instituciones serían atacadas, se debilitarían las finanzas y se exacerbaría la violencia en caso de que gane Andrés Manuel López Obrador.
“Las instituciones (Banxico, INE, INAI) van a enfrentar un ataque como el que no hemos visto en muchos años, habrá que ver (si resisten) y ojalá no lo pongamos a prueba.
“Veo el riesgo de que se debiliten nuestras finanzas públicas, un país con una gran inseguridad la va a ver exacerbada si no tenemos consecuencias, en un país que tiene un gran problema de pobreza y donde no encontramos en la propuesta nada que la alivie, que la acompañe que permita resolver los problemas estructurales”, señaló.
Minimizó el lugar en el que lo posicionan diversas encuestas, incluso, dijo, que contempla el escenario donde en el último día de campaña estas mediciones lo sigan ubicando en tercer lugar y el día de la jornada gane la Presidencia.
Meade negó ante las constantes preguntas del periodista Carlos Loret de Mola ser el abanderado de la continuidad.
Afirmó que al tricolor y “al aparato” le alcanzan los días restantes de campaña para convencer y ganar, e insistió: “El Presidente no está en la boleta”.
“Le alcanza al PRI con el aparato para salir a hablar y convencer, para salir a espacios como estos y defender lo que cree, y de eso nos vamos a sentir orgullosos de decir y defender lo que le conviene al país”.
Antes, Meade afirmó que el interés de López Obrador por los maestros “no va más allá del 1 de julio”.
En un mensaje a medios en CdMx presentó su propuesta para el beneficio de los profesores: aumento de salario, fortalecimiento y actualización de escuelas normales y la creación del primer instituto prodocente de educación continua y acompañamiento. El candidato de la coalición Todos por México dijo que en las elecciones está en juego el modelo de educación, el que representa él y el que encabeza el abanderado de Morena-PTPES, la cual, acusó, no resuelve ni los problemas del país ni de la educación ni del magisterio, toda vez que, dijo, no se ve en sus propuestas interés por la calidad de la educación ni tampoco compromiso con el futuro de los niños mexicanos.