Fracasan intentos de tumbar a Oseguera
Aunque la candidatura de Adrián Oseguera a la alcaldía de Madero ya estaba validada por el Trife, todavía dos personas insistían en bajarlo de la contienda, mediante dos apelaciones y dos juicios de defensa de derechos políticos ciudadanos, promovidos ante el Tribunal Electoral de Tamaulipas, mismo que los desechó.
Los últimos intentos de Alfredo Pliego Aldana y Carlos Turrubiates para echar abajo la postulación realizada por la coalición Juntos Haremos Historia se vinieron abajo, pues el Trieltam los declaró improcedentes.
Los Magistrados determinaron que se trataba de “cosa juzgada”, con lo que concluyen los recursos legales que reiteradamente formularon las personas antes señaladas.
La tarde del miércoles, durante la sesión del Trieltam, se analizó el recurso de apelación identificado como TE-RAP-30/2018 y su acumulado TE-RAP-31/2018, en los cuales Carlos Enrique Turrubiates Carreto y Alfredo Pliego Aldana impugnan el registro de Adrián Oseguera, argumentando que no cumple con los requisitos de ley, en cuanto a residencia y lugar de nacimiento.
El Pleno del Tribunal Electoral del Estado, estimó desechar ambos recursos, ya que el acto impugnado es “cosa juzgada”, pues la pretensión de los actores era igual a la que plantearon en el expediente TE-RAP-12/2018.
Ademásdequeelproblemajurídico, fue analizado por la Sala Regional Monterrey del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, en el juicio para la protección de los derechos políticos electorales del ciudadano SM-JDC-453/2018 y su acumulado SM-JRC-88/2018, misma que declaró subsistente el registro de la candidatura en cuestión.
Por otra parte, también fueron desechados los recursos ciudadanos identificados con las claves TE-RDC-63/2018 y su acumulado TE-RDC-64/2018, promovidos por las mismas personas, en contra del dictamen de la Comisión Nacional de Elecciones de Morena, por aprobar el registro de Oseguera como candidato.
Los Magistrados desecharon estos recursos porque se actualiza la causal de improcedencia por ser “cosa juzgada”. Pliego y Turrubiates pretendían impugnar un acto que anteriormente había sido objeto de estudio y su sentencia había quedado firme para todos los efectos.