Participa Rector de la UAT en reunión de CUPIA-ANUIES
El Rector José Andrés Suárez Fernández participó en la LI Reunión Ordinaria del Consejo de Universidades Públicas e Instituciones Afines (CUPIA), en cuyo marco afianzó la colaboración y suma de esfuerzos de la Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT) para contribuir al fortalecimiento de la educación superior del país.
El CUPIA es el órgano colegiado de la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES) encargado de coordinar el trabajo de las instituciones públicas asociadas.
Entrevistado en el marco previo a la sesión, que tuvo como sede la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL), el Rector Suárez Fernández destacó la oportunidad de estrechar lazos y tratar los temas para el desarrollo de las Universidades, además de fortalecer los mecanismos de colaboración como miembros de este organismo nacional. “La UAT como todas las universidades tenemos la obligación de formar profesionistas que requiere el estado y la región, contribuir al desarrollo regional y en eso estamos enfocados”, dijo.
“Por ello, esta reunión nos sirve para compartir, nutrirnos de experiencias y hacer intercambios; como también de llegar a consensos para presentar propuestas a nuestros gobiernos, tanto estatales como federales, para mejorar la educación superior”, acotó.
Laquincuagésimaprimerareunión ordinaria del CUPIA se desarrolló en las instalaciones de la Biblioteca “Raúl Rangel Frías” de la UANL, encabezada por el Secretario General Ejecutivo de la ANUIES, Jaime Valls Esponda; el Subsecretario de Educación Superior de la SEP, Rodolfo Tuirán Gutiérrez; y el Rector de la UANL, Rogelio Garza Rivera.
La inauguración estuvo a cargo del Subsecretario Rodolfo Tuirán, quien reconoció los esfuerzos de las universidades públicas para sustentar la expansión de la cobertura educativa superior y elevar la calidad de sus programas educativos. Señaló además que las IES tendrán que orientar esfuerzos para enfrentar desafíos como el financiamiento, la cobertura, calidad y pertinencia de la oferta educativa.
Por su parte, el titular de la ANUIES, Jaime Valls puntualizó elcompromisode las universidades públicas para renovar la educación superior en México, aportar ideas que contribuyan a su fortalecimiento y construir acuerdos que posibiliten a los académicos, investigadores y estudiantes aportar soluciones a los problemas nacionales.m on Algón, maduro ejecutivo, le dijo a la voluptuosa rubia que buscaba empleo: “Veo que pide usted 5 mil pesos de sueldo a la semana, señorita Florilí. Se los pagaré con placer”. “¡Ah no! -replicó prontamente la muchacha-. ¡Tendrá que pagarme con dinero!”... Don Sinople le dijo a doña Panoplia, su mujer: “Si supieras cocinar no tendríamos que pagar una cocinera”. Replicó ella: “Y si tú supieras follar no tendríamos que pagar un chofer”. El experto en motivación daba una conferencia a las esposas de los vendedores, y trataba de enseñarles que la ayuda de la mujer es importante en el trabajo de su marido. “Por ejemplo usted, señora -se dirigió a una esposa joven-. Díganos qué hace para estimular a su marido”. Preguntó la muchacha, ruborosa: “¿Aquí, delante de todos?”. Doña Frigidia, ya se sabe, es la mujer más fría del planeta. En cierta ocasión pasó frente a una agencia de viajes que anunciaba un viaje a Honolulú, y eso bastó para que ese año se helara toda la cosecha de ananás en las islas de los Mares del Sur. Una vez el marido de la gélida mujer le contó a un amigo: “La otra noche le hice el amor a mi mujer en forma tan apasionada que por poco la despierto”... Se cuenta que alguien le preguntó a Mao qué sucedería en caso de que China entrara en guerra con Estados Unidos. “Sus ejércitos son superiores a los nuestros -respondió el dirigente chino-. El primer día nos harán un millón de prisioneros. El segundo día dos millones. El tercer día cuatro millones. El cuarto día ocho millones. El quinto día nos harán 16 millones de prisioneros. El sexto día se rendirán”. China es, en efecto, un enorme país con una población que se antoja innumerable. No es ya China aquel país rural que describió Pearl S. Buck en bellas novelas como “La buena tierra”, en la cual un campesino explicaba por qué un hombre podía tener varias esposas, pero no una mujer varios maridos: “He visto muchas jarras de té con cuatro tazas, pero jamás he visto una taza de té con cuatro jarras”. Ya no es ni siquiera China el “gigante dormido” de que habló Churchill. Ahora es un gigante bien despierto que desechó antiguas tradiciones y usos del pasado para incorporarse a la modernidad mediante una economía de mercado, y que así fortalecido se dispone a conquistar el mundo por el medio más eficaz y más pacífico: el comercio. Ninguna restricción como las que Trump le ha puesto frenarán su acometida, pues el dinero no sabe de ideologías o nacionalidades, y si China ofrece al mundo productos de calidad a bajo precio -ya lo está haciendo- conquistará mercados que ahora son de otros países. Lo veremos. Una joven mujer fue a consultar a Madame Horshit, adivinadora. La mujer clavó la vista en su bola de cristal y luego le dijo con sibilina voz a la muchacha: “Conocerás a un hombre alto, guapo, musculoso, rico e inteligente que te pedirá que te cases con él”. Le preguntó la chica: “¿Y qué haré con el hombre chaparro, feo, panzón, pobre y pendejo con el que ya estoy casada?”. Un individuo se presentó ante el juez: “Quiero divorciarme de mi esposa”. “¿Por qué?” -preguntó el juzgador. Respondió el sujeto: “Por adúltera y afrentosa”. “Lo de adúltera lo entiendo -dijo el juez-. Pero, ¿qué es eso de ‘afrentosa?’”. “Permítame explicarle -contestó el tipo-. Ayer llegué a mi casa y encontré a mi esposa en el lecho conyugal en brazos otro hombre”. “Ya veo -manifestó el letrado-. Ahí está lo de adúltera”. “Ahora viene lo de afrentosa -prosiguió el individuo- Cuando mi mujer me vio ni siquiera dejó de hacer lo que estaba haciendo. Siguió con sus meneos y me dijo: ‘¡Qué bueno que llegaste, Corneliano! Siéntate y fíjate muy bien cómo lo hace este señor, a ver si aprendes’”... FIN. De todos los medios se han valido los humanos para tratar de adivinar el futuro.
Han usado la quiromancia, que es la adivinación por la lectura de la mano; la oniromancia, adivinación a través de los sueños; la piromancia, adivinación por las figuras que forman las llamas de una hoguera; la licanomancia, adivinación mediante los reflejos de los objetos en el agua; la catoptromancia, adivinación hecha con el uso de un espejo; la hidromancia, adivinación por medio del agua; la cleromancia, adivinación que se hace echando suertes; la ornitomancia, adivinación por el vuelo de las aves; la teratomancia, adivinación por el nacimiento de seres monstruosos o deformes .... Sin despreciar tantas y tan variadas técnicas -no cito la extispicina, que era la adivinación por el examen de las entrañas de una víctima sacrificada; los auspicios, adivinación por el vuelo de las aves; ni la hepatoscopia, adivinación que se hace mirando el hígado de un animal -sin despreciar todo eso, digo, a mí no me atemoriza que me adivinen el futuro.
A mí más bien lo que me causa miedo es que alguien me adivine el pasado. ¡Hasta mañana!... “... Preocupa el aumento de problemas por acoso sexual...”.
Con tal noticia ya me anda, pues si una mujer me acosa no podré hacer otra cosa que ponerle una demanda.