Arco Madrid. Vargas Llosa abre la feria de arte contemporáneo
Con énfasis en la pintura y la escultura, el encuentro tiene a Perú como invitado; habrá 203 galerías y 300 coleccionistas
La feria de arte contemporáneo Arco Madrid abrió sus puertas hoy con el acento puesto en la escultura y la pintura, en una edición en la que el coleccionista latinoamericano gana peso y en la que Perú es el protagonista como país invitado.
Perú prepara un menú que pone especial atención a la vinculación de su arte contemporáneo con el prehispánico, virreinal y amazónico, mientras el escritor Mario Vargas Llosa ofrece la charla inaugural junto con el crítico de arte y comisario Juan Manuel Bonet en el Auditorio Foro.
Perú llega al Museo del Prado con la obra invitada durante la semana de Arco, el cuadro El matrimonio de Martín de Loyola y de doña Beatriz Clara Coya Ñusta, una creación cumbre de la escuela cusqueña (siglo XVII) que está en la pinacoteca española desde el 18 de febrero y se quedará allí dos meses.
Otro de los platos fuertes, también fuera del espacio de Ifema, es la llegada a la Fundación Telefónica de la exposición sobre Nazca, la ciudad peruana famosa por sus geoglifos (dibujos geométricos gigantes en explanadas, visibles desde el cielo). “Hay que desmitificar las leyendas sobre este espacio”, explica la subdirectora del museo MALI y comisaria de esta exposición, Cecilia Pardo.
Los geoglifos de Nazca ocupan más de 500 kilómetros cuadrados —“algo tan grande es imposible de proteger”, reconoce Pardo—, y fueron concebidos como ofrendas a los dioses —de hecho, se cree que tenían miradores para observar desde arriba estas figuras—. Pardo reivindica a la cultura responsable de estos dibujos. “Fue una civilización en uno de los lugares más áridos del mundo y se conservan de ellos cerámicas, tejidos y objetos de madera”, apuntó.
Amazonía
La Amazonía tendrá su espacio propio en Matadero Madrid, un lugar que ha generado cierta polémica en el país peruano por ocupar espacio del arte contemporáneo. “Aquí hay un debate antiguo desde los años 70, cuando algunos artistas reaccionaron mal a un Premio Nacional de Cultura a un artista amazónico. Yo no comparto esa postura, a mí no me afecta y creo que las divisiones no están definidas. Perú es un país con asuntos irresueltos, pero hay que saber que aquí hay muchas realidades”, destaca la artista Gilda Mantilla, que acude con su obra a Madrid.
Con el desembarco en Casa de América de la colección Jan Mulder de fotografía contemporánea llega también la obra de Roberto Huarcaya y su serie de Amazogramas, imágenes captadas en un rollo de papel fotosensible de 30 metros de largo durante la noche en la selva peruana. “El Amazonas es un espacio olvidado históricamente y creo que arrastramos unos desencuentros históricos con un paisaje lleno de vitalidad”, acotó el fotógrafo.
La escultura
Doscientas tres galerías de 31 países y 300 coleccionistas par-