Crisis venezolana polariza también Naciones Unidas
Rusia y EU presentan opciones distintas y son rechazadas
Rusia y China vetaron ayer un proyecto de resolución estadunidense en el Consejo de Seguridad de la ONU que urgía a celebrar elecciones “justas” en Venezuela, pero una contrapropuesta de Moscú también naufragó al no cosechar los votos necesarios.
Las fracasadas votaciones dejaron en evidencia la división entre las potencias mundiales en Naciones Unidas sobre qué cami- no seguir en Venezuela, sumida en una grave crisis política y con su economía en colapso.
El texto estadunidense, que también pedía el ingreso “sin trabas” de ayuda humanitaria a Venezuela, recibió el apoyo de nueve de los 15 miembros del Consejo, entre ellos Francia, Gran Bretaña, Alemania, Perú y República Dominicana.
Hubiera bastado para aprobarlo, si no fuera por el doble veto de China y Rusia. Sudáfrica votó en contra, mientras Indonesia, Guinea Ecuatorial y Costa de Marfil se abstuvieron.
El texto ruso, que expresaba inquietud por “amenazas del uso de la fuerza” en Venezuela, obtuvo solo cuatro votos a favor (Rusia, China, Sudáfrica y Guinea Ecuatorial), siete en contra y cuatro abstenciones.
“Lamentablemente, al votar contra esta resolución algunos miembros de este Consejo continúan protegiendo a (Nicolás) Maduro y sus cómplices y prolongando el sufrimiento de los venezolanos”, lamentó en el Consejo el representante estadunidense para Venezuela, Elliott Abrams.
El opositor Juan Guaidó, jefe del Parlamento, se proclamó presidente interino hace un mes y es reconocido como tal por más de medio centenar de países, al tiempo que desconocen a Maduro como mandatario.
“Estados Unidos parece haber olvidado lo que es el derecho internacional (...) Esto es una cortina de humo, lo único que desean es que haya un cambio de gobierno (...) disfrazado de asistencia para la gente”, afirmó el embajador ruso ante la ONU, Vassily Nebenzia. “Todos ya vimos esto en Libia, Irak, Siria y Afganistán”.
El número dos chino en la ONU, Wu Haitao, sostuvo por su lado que “las cuestiones de Venezuela deben ser decididas por el pueblo venezolano”.
El embajador de Caracas ante la ONU, Samuel Moncada, denunció tras la votación el “masivo robo de más de 30 mil millones de dólares” al pueblo venezolano por parte de Washington y Londres, que han congelado sus activos.
Venezuela atraviesa la peor crisis de su historia moderna, con hiperinflación y una escasez de alimentos y medicamentos que ha provocado el exilio de 2.7 millones de personas desde 2015.