Escenarios. Tras 10 años, deja su sede la Galería Project Art
José Luis Díaz y Caín Valdez, hablan de su visión cultural y la nueva propuesta el espacio de arte
Caín y José Luis se sientan en dos sillas rústicas al pie del estante lleno de libros y enfrente de las mesitas que empiezan a ocupar el espacio de la que pronto dejará de ser la Galería Project Art.
Desde afuera los anuncios de venta y renta, son augurio del giavisan ro que dará la vivienda en el 209 de la Calle Victoria.
Ya el viernes pasado, durante su exposición “El ego y el canto del cisne”, el maestro Fernando Vega y Gómez, tras un sorpresivo performance, adelantó el cierre.
El sitio, utilizado en comodato, les fue solicitado justo en marzo, mismo mes que llegaron en 2009, “un día nos dijeron dándonos las llaves, ‘¿quieren ocuparlo, me el lunes, y mira, eso fue hace 10 años” comenta Caín Valdez
Un montón de historias entre cigarro y cigarro, “no creo que podamos dejarlo, después de 30 años, es una responsabilidad con nosotros y nuestra ciudad... aquí estamos y vamos a seguir, hasta que un día ya no me levante” cita.
“La galería es importante y necesaria desde el punto de vista de que si preparamos pintores, alumnos de aquí se hacen pintores, necesitamos un espacio de exposición, y hemos tenido de fuera, ¡hasta Reyes Meza expuso en la Galería!” exclama.
Sobre esto, José Luis Díaz, Primer Lugar en la Primera Bienal de Pintura “Paso del Norte” en 1996, recuerda el origen de Project Art, y el peso que cargaron.
“Empezamos cuando no había espacios oficiales, con Visual 15, a inicios de los 80, no había casa de la Cultura, menos el Metro, las exposiciones eran en el Casino (Tampiqueño)y en el sala de cabildo del Ayuntamiento”.
Recuerda sobre el maestro José Reyes Meza “Fue un sexenio del gobierno del estado no tenía buenas relaciones con el ayuntamiento y nos mandaba todos los eventos a nosotros y teníamos exposiciones cada mes y cuestiones de literatura, porque éramos el único sitio adecuado”.
Sin apoyos
“Van 20 años del festival Cecilia Sanz, de Ridaura, abarcando todas las expresiones... y sin apoyos” contesta Caín a la pregunta de su impacto en la sociedad.
“Estamos acostumbrados a trabajar sin apoyos, no es problema, los resolvemos, si vienen qué bueno, si no, ni modo, seguimos adelante”, acota José Luis.
“Es nuestra vida, nuestra sed, lo que nos mantiene vivos, y la relación con todos, como con Fernando (Vega y Gómez), que vino y nos sorprendió, nadie sabía lo que iba a hacer, ¿Cómo no te va a enriquecer eso?”, remata Caín.
Cultura oficial, mal enfocada
Sobre el trabajo que desarrolla la galería, la formación de nuevos artistas, pintores principalmente, aunque muchos han desarrollado otra profesión u oficio.
“No es a través de llevarles eventos, si no que la gente se involucre, a lo mejor será mal músico no importa, pero se va a someter a la disciplina, al ejercicio y eso provoca más cambio que ir a ver una exposición o un concierto” dice el pintor José Luis Díaz.
“Cómo es posible que solo sea una Casa de la Cultura, se tienen que abrir más espacios, en la Borreguera, en Tancol, ¿porqué encerrar todo en el centro?, a la gente de lejos y sin economía no les toca nada de cultura, ¡alumnos vienen a pie desde Madero!”.
Y siguen empacando.