“Cuando salí en pensé que mis padres se iban a infartar”
Como buena norteña, a la senadora le gusta la carne con ensalada mixta, su platillo favorito; es cinéfila y lectora, entre otras feministas, de Rosario Castellanos, Elena Poniatowska y Sabina Berman
Desde niña, Patricia Mercado (Ciudad Obregón, 1957) fue una líder, incluso su padre la llamaba de cariño “cencerro”, porque siempre llegaba a su casa con muchas niñas detrás de ella.
Desde el Monumento a la Madre, donde en 1990 participó en la colocación de la placa en la que se lee: “Porque su maternidad fue voluntaria”, en el contexto de la lucha de los derechos de las mujeres, recuerda que, tras asistir a su primera marcha por el aborto, apareció en la contraportada de la revista Alarma, que le provocó una gran angustia, porque temía que sus padres se enteraran de su activismo, por lo que pensó en comprar todos los ejemplares en el país.
Lejos quedó la anécdota de la protesta estudiantil; sin embargo, la lucha de la ex secretaria de Gobierno capitalino, ex candidata presidencial y ahora legisladora por garantizar la seguridad e igualdadparatodaslasmujerespersiste.
¿Cómo fue su niñez?
De barrio. Siempre andaba descalza porque en Sonora hacía mucho calor. Mi papá decía: “ahí viene el cencerro”, porque siempre venía con muchas niñas atrás. Jugaba mucho, tuve muy bonita niñez. En la escuela era buena, muy aplicada.
¿Qué hace cuando no está en el Senado?
Convivo con mis hijos y con mi marido; también les doy tiempo a las amigas. Cuido los espacios que tengo para alimentar las relaciones con dos o tres grupos.
¿Qué le gusta más, la playa o el campo?
La playa, soy urbana. Vacaciones Una historia de amor y oscuridad, de Amos Oz.