Los miedos en torno a la sexualidad
“Uno de los principales miedos con los que vive la gente es el de perder a la pareja, lo cual es absurdo porque procede de la idea de que es fundamental mantener la relación durante toda la vida, casi desde el primer novio o novia, pero el cambio es fundamental para la vida. No hay que tener temor de que nos dejen porque lo ideal es separarse estando de acuerdo, aunque la relación prevalezca. Darse aire, tiempo. Preguntarse qué pasaría si no estamos con esa persona; cuando nos demos cuenta de que no pasaría nada, de que la vida sigue y podemos ser igual o más felices, entonces todo cambia”, explica Santandreu.
Mucho de todo esto viene de momentos históricos que ya no tienen razón de ser: “La monogamia ha estado al servicio de la propiedad privada, no es una cosa natural. Podríamos organizarnos de otra manera sin hacernos la vida imposible por eso. El miedo es la emoción que más quita la salud mental, sin embargo, se puede eliminar razonando correctamente”. Para el psicólogo, un truco eficaz es “copiar la filosofía de esas personas que viven sin miedos. Escucharlas o leerlas, tratar de comprender a qué se debe su felicidad y bienestar, para tratar de ir adecuando poco a poco un estilo de vida semejante que se adapte a la realidad de cada uno. La psicología cognitiva requiere que la gente haga un ejercicio de apertura mental, de ver las cosas con una óptica diferente de como las ha visto”.
Otro problema, dice, es que nos exigimos demasiado a nosotros mismos: “Queremos tener la casa más linda, ser exitosos en el trabajo, viajar por el mundo, estar delgados o tener un cuerpo perfecto, una pareja que podamos presumir, ser extrovertidos, cultos, vivir el lujo o el ocio con derroche. Las mujeres tienen más carga aún: siempre deben estar guapas para los demás y obedecer a los hombres. ¡Es irreal, imposible! Lo curioso es que lo vemos como objetivo de vida que se vuelve un lastre, la base del estrés y la inconformidad. Seguir tu propia cura puede ser bonito y una experiencia similar a aprender un idioma a través de un manual”.